Mascarillas y COVID-19: lo que debe saber
El uso de una mascarilla juega un papel clave a la hora de frenar la propagación del coronavirus. Aquí le explicamos cómo.
Por Robyn Abree
En general, los expertos en salud están de acuerdo: usar una mascarilla es una forma simple y efectiva de frenar la propagación del nuevo coronavirus. Esto puede parecer un cambio radical con respecto a los mensajes de los primeros días de la pandemia, pero hay una razón para eso, explica George Rutherford, MD, profesor de epidemiología y bioestadística en la Universidad de California en San Francisco.
"La ciencia evoluciona", afirma el Dr. Rutherford. "El papel sustancial que juega la transmisión asintomática en la transmisión del virus no se entendió hasta más tarde".
También agrega que los expertos pueden haber dudado en promover el uso de mascarillas sin mucha evidencia por temor a que las personas acumularan las de uso médico que escaseaban.
Si bien es lamentable que la información haya cambiado, esta nueva comprensión puede brindarnos una gran libertad, expresa el Dr. Rutherford.
"Podemos quedarnos encerrados para siempre o podemos usar mascarillas", indica el Dr. Rutherford. "Es cuestión de tomar una decisión".
La ciencia detrás de la protección
Se cree que las gotículas que expulsamos al hablar, estornudar y toser son el principal modo de transmisión del virus. Las mascarillas ayudan a frenar la propagación al atrapar las gotículas infectadas y evitar que lleguen muy lejos.
Los investigadores y expertos en salud pública enfatizan que la razón principal para usar mascarillas es prevenir la propagación asintomática del virus. Es decir, usa una mascarilla para proteger a los demás en el caso de que, sin saberlo, tenga el virus.
Esto sigue siendo cierto, pero la creciente evidencia sugiere que las mascarillas también brindan cierta protección al usuario, señala Richard Wenzel, profesor del Departamento de Medicina Interna y de la División de Enfermedades Infecciosas de la Universidad de la Mancomunidad de Virginia.
El Dr. Wenzel cita un metanálisis de 172 estudios que analizaron varias intervenciones para prevenir la transmisión de SARS, MERS y COVID-19. El estudio, que se publicó el 1 de junio en The Lancet , descubrió que el uso de mascarilla redujo significativamente el riesgo de que una persona sana contrajera el virus, si se exponía a él.
Aunque la calidad de los datos fue de baja a moderada, Wenzel manifiesta que esto muestra "evidencia notable para el usuario", y probablemente solo se consolidará a medida que se realicen más estudios.
El Dr. Rutherford agrega que los lentes pueden brindarle aún más protección. Pueden ser gafas de cualquier tipo, no necesariamente tienen que ser gafas protectoras, señala.
El Dr. Rutherford también explica que las mascarillas pueden reducir la cantidad de virus a la que está expuesto el usuario, lo que posiblemente resulte en una enfermedad menos grave en caso de infección. Es decir, si alguien exhala gotículas respiratorias cerca de usted, su mascarilla puede ayudar a bloquear parte del virus. Pero el Dr. Rutherford señala que esta teoría, compartida por otros expertos en enfermedades infecciosas, aún no se ha probado.
Pero las mascarillas por sí solas no son infalibles, indica el Dr. Wenzel. Para que sean efectivas, todos deben usarlas, afirma. De todos modos, la posibilidad de infección sigue estando, explica el Dr. Rutherford. Su mejor opción para estar protegido: combine el uso de mascarillas con el distanciamiento social (especialmente en lugares cerrados), lávese bien las manos y manténgase alejado de cualquier persona que no use una mascarilla.
Cuándo usar una mascarilla
Adquiera el hábito de usar una mascarilla cada vez que salga de casa, excepto en su auto, indica el Dr. Rutherford.
Esta regla se aplica especialmente en los espacios cerrados, pero también en espacios al aire libre donde es difícil practicar el distanciamiento social, manifiesta el Dr. Wenzel.
Señala que la regla de 6 pies proviene de estudios realizados en la década de 1930, y la nueva evidencia muestra que esto no es suficiente.
"Un solo estornudo puede viajar 20 pies", explica. "Seis pies de distancia no lo protegerán si usted y quienes lo rodean no usan mascarillas".
También hay alguna evidencia que sugiere que partículas de virus más pequeñas, llamadas aerosoles, pueden permanecer en el aire horas después de que una persona infectada haya estado en el lugar, señala el Dr. Wenzel. Por lo tanto, usar una mascarilla en lugares cerrados cuando no hay nadie cerca, particularmente en espacios reducidos como ascensores, puede protegerlo de inhalar algunos de restos de partículas, explica.
Incluso si usa una mascarilla, limite el tiempo compartido en espacios cerrados públicos, si puede hacerlo, indica el Dr. Wenzel. Señala que un artículo reciente publicado por los CDC reveló que el riesgo de infección es casi 20 veces mayor en lugares cerrados.
En cuanto a las citas con el médico y otras tareas necesarias, existe evidencia de que el uso universal de mascarillas puede reducir el riesgo de infección, afirma el Dr. Rutherford.
Señala un informe reciente de los CDC, que analizó un caso en el que dos estilistas de Missouri dieron positivo en coronavirus y potencialmente expusieron a 140 personas. Según el informe, ambos eran sintomáticos y usaban mascarillas, pero no se vincularon nuevos casos o síntomas en la peluquería. (Nota: solo 67 clientes aceptaron hacerse la prueba del virus y se practicó el distanciamiento social en la peluquería, lo que limitó a los clientes al 25% de su capacidad).
Los autores del estudio notaron algunas limitaciones, lo que incluye que la mayoría de los estilistas cortan el cabello mientras los clientes están de espaldas a ellos, lo que también puede hacer que la transmisión sea limitada. Estos resultados no suponen que las mascarillas sean escudos perfectos, explica el Dr. Rutherford, pero sugieren que son ciertamente útiles.
Tipos de mascarillas
El grado de protección proporcionado (tanto para el usuario como para las personas que lo rodean) depende del tipo de mascarilla.
Las mascarillas N95 todavía escasean y deben reservarse para los trabajadores de la salud y los médicos. Se supone que las mascarillas KN95, que están reguladas por el gobierno chino, imitan a las N95, pero las pruebas revelan que muchas de ellas en los EE. UU. son falsas o de baja calidad. Es difícil respirar con ambos tipos de mascarillas.
Las mascarillas quirúrgicas están diseñadas para proteger a los demás, pero las pruebas sugieren que incluso estas pueden brindar cierta protección al usuario. Es importante comprar las que están hechas con polipropileno, que tiene una carga estática que atrapa mejor las gotículas que entran y salen.
La protección de las mascarillas de tela depende del material del que están hechas y de qué tan bien se adaptan a la cara. Pero con la combinación correcta de materiales, las mascarillas de tela pueden ser efectivas y cómodas para respirar adecuadamente.
De hecho, los investigadores de la Universidad Atlántica de Florida descubrieron que, en comparación con los pañuelos y las mascarillas tipo cono que se encuentran en la mayoría de las farmacias, las de algodón de doble capa fueron las más efectivas para reducir la propagación de gotículas hacia adelante.
Al hacer o seleccionar una mascarilla de tela, elija una con varias capas (al menos dos) y evite las telas sintéticas como el poliéster. En su lugar, opte por mascarillas que estén hechas con telas de tejido cerrado, como las que tienen 100% algodón, con al menos 70 hilos por pulgada. Si no está seguro de la calidad de su mascarilla, sosténgala contra la luz. Si puede ver fácilmente a través de ella, probablemente no le brinde mucha protección.
La forma también importa. Las mascarillas que se adaptan bien a la cara y están hechas con pliegues y dobleces son preferibles a las que tienen un diseño plano. Permiten un mayor flujo de aire a través de la tela en lugar de los costados.
Agregar un filtro a una mascarilla de tela de varias capas también puede aumentar la protección. Elija un filtro que tenga dos capas de polipropileno. Si bien es importante lavar la mascarilla de tela después de cada uso, lavar los filtros puede reducir su carga electrostática. Recargue sus filtros planchándolos o frotándolos con un guante de plástico hasta que vuelvan a tener estática.
Conclusión
Usar mascarilla es fundamental para protegerse a uno mismo y a los demás, pero no debe ofrecer una falsa sensación de seguridad. Continúe manteniendo una distancia social de al menos 6 pies, preferiblemente más, de los demás, lávese las manos con frecuencia y limite el tiempo en espacios cerrados compartidos.