Celebrar las victorias cotidianas
Lisa Bloom, a quien le diagnosticaron artritis cuando tenía un año, no deja que la artritis la defina.
Una infancia desafiante
"No define quién eres". Así describe Lisa Bloom la artritis. Es maravilloso decir algo así, teniendo en cuenta que la ha tenido desde que tiene memoria.
"Mi camino con la artritis comenzó cuando tenía alrededor de un año de edad", explica Lisa. "Evidentemente (ya que no lo recuerdo), había comenzado a caminar… y luego dejé de hacerlo. Mis padres me llevaron a una serie de médicos y, al final, terminé en la Mayo Clinic". Allí es donde le diagnosticaron, cuando tenía dieciocho meses, lo que entonces se llamaba "artritis reumatoide juvenil".
El primer brote que sí puede recordar fue cuando tenía doce. En ese momento, a principios de la década de 1970, los médicos tenían un enfoque respecto de la artritis muy diferente al actual. Su consejo era ser lo más sedentario posible, de manera que Lisa tuvo que dejar de hacer toda actividad física. "Fue muy traumático para mí", afirma. "Pasé de ser muy extrovertida y comprometida a ser muy introvertida".
Recuerda sentir que era la única niña en el mundo que tenía artritis. Por eso, su esposo y ella están muy comprometidos con apoyar los campamentos para niños con artritis de la Arthritis Foundation. Lisa imagina cuán diferentes hubieran sido las cosas si ese tipo de actividad hubiera estado disponible para ella. "No me hubiera sentido tan sola".
"Me daba mucho miedo cuando era pequeña. Porque iba al consultorio del reumatólogo, veía a personas de la tercera edad en sillas de ruedas y pensaba que esa iba a ser yo".
Una adultez activa
Lisa atribuye el hecho de que se mantuvo saludable y activa a la buena atención médica que ha recibido. Actualmente, jubilada de su trabajo como diseñadora de software, su esposo Lee y ella disfrutan de cocinar, practicar senderismo, hacer buceo, sacar a pasear a su perro y caminar con raquetas para nieve.
No ha sido un camino fácil. En primer lugar, como muchos de los pacientes con artritis saben, los signos no siempre son obvios. "Hay personas que me han dicho 'No te creo'", comenta. "Porque no tengo todos los signos obvios de una persona que tiene artritis, así que mis manos se ven bien".
Pero en otros momentos, es muy visible. "Cuando tengo un brote en la rodilla, se hincha de tal manera que no puedo subirme la pierna del pantalón. Se hincha hasta el punto que la piel no puede estirarse más".
De todos modos, Lisa dice que sigue teniendo esperanza para el futuro debido a todos los avances en el tratamiento. "He tomado muchos medicamentos diferentes a lo largo de los años porque, en algún momento, dejan de funcionar. Así que el hecho de que haya más entre los que elegir y de que no haya llegado al final de la línea es muy alentador".
En ocasiones, ha sido difícil obtener una cita con un reumatólogo. Recientemente, estaba haciendo llamados para obtener una cita con un reumatólogo nuevo, y la primera cita disponible era en tres meses. "Eso me indica que necesitamos más reumatólogos o que debe haber algún cambio".
Un futuro prometedor
Para acelerar ese cambio y dar lugar a un futuro en el que todos puedan obtener una cita con un reumatólogo cuando la necesitan, Lisa y su esposo Lee demuestran su espíritu navideño con una donación increíblemente generosa a la Arthritis Foundation. Es una donación que trae un desafío para otros defensores: ¡duplíquenla!
La donación de los Bloom ayudará a nuestras iniciativas por ampliar la cantidad de oportunidades de becas para reumatólogos y centrarnos en las comunidades con mayor escasez. Esperan que esta donación inspire a otras persona a donar la cantidad que puedan para "apoyar a la organización para que pueda apoyarlo a usted".
Celebrar las victorias durante las fiestas
Vivir con artritis puede ser una batalla constante, y las personas como Lisa saben que celebrar las pequeñas victorias puede ser alentador, en especial, en esta época del año.
Dado que el estrés puede exacerbar los síntomas de artritis, una victoria durante las fiestas para los Bloom es un momento tranquilo en casa horneando algo con su hijo. Con la inspiración de haber visto el programa de repostería Great British Bake Off, recientemente, se han establecido el desafío de aprender algunos platos elaborados que tardan varios días en estar listos. Ya sea una noche tranquila horneando, una caminata enérgica o una escapada, no dan nada por sentado.
Una infancia desafiante
"No define quién eres". Así describe Lisa Bloom la artritis. Es maravilloso decir algo así, teniendo en cuenta que la ha tenido desde que tiene memoria.
"Mi camino con la artritis comenzó cuando tenía alrededor de un año de edad", explica Lisa. "Evidentemente (ya que no lo recuerdo), había comenzado a caminar… y luego dejé de hacerlo. Mis padres me llevaron a una serie de médicos y, al final, terminé en la Mayo Clinic". Allí es donde le diagnosticaron, cuando tenía dieciocho meses, lo que entonces se llamaba "artritis reumatoide juvenil".
El primer brote que sí puede recordar fue cuando tenía doce. En ese momento, a principios de la década de 1970, los médicos tenían un enfoque respecto de la artritis muy diferente al actual. Su consejo era ser lo más sedentario posible, de manera que Lisa tuvo que dejar de hacer toda actividad física. "Fue muy traumático para mí", afirma. "Pasé de ser muy extrovertida y comprometida a ser muy introvertida".
Recuerda sentir que era la única niña en el mundo que tenía artritis. Por eso, su esposo y ella están muy comprometidos con apoyar los campamentos para niños con artritis de la Arthritis Foundation. Lisa imagina cuán diferentes hubieran sido las cosas si ese tipo de actividad hubiera estado disponible para ella. "No me hubiera sentido tan sola".
"Me daba mucho miedo cuando era pequeña. Porque iba al consultorio del reumatólogo, veía a personas de la tercera edad en sillas de ruedas y pensaba que esa iba a ser yo".
Una adultez activa
Lisa atribuye el hecho de que se mantuvo saludable y activa a la buena atención médica que ha recibido. Actualmente, jubilada de su trabajo como diseñadora de software, su esposo Lee y ella disfrutan de cocinar, practicar senderismo, hacer buceo, sacar a pasear a su perro y caminar con raquetas para nieve.
No ha sido un camino fácil. En primer lugar, como muchos de los pacientes con artritis saben, los signos no siempre son obvios. "Hay personas que me han dicho 'No te creo'", comenta. "Porque no tengo todos los signos obvios de una persona que tiene artritis, así que mis manos se ven bien".
Pero en otros momentos, es muy visible. "Cuando tengo un brote en la rodilla, se hincha de tal manera que no puedo subirme la pierna del pantalón. Se hincha hasta el punto que la piel no puede estirarse más".
De todos modos, Lisa dice que sigue teniendo esperanza para el futuro debido a todos los avances en el tratamiento. "He tomado muchos medicamentos diferentes a lo largo de los años porque, en algún momento, dejan de funcionar. Así que el hecho de que haya más entre los que elegir y de que no haya llegado al final de la línea es muy alentador".
En ocasiones, ha sido difícil obtener una cita con un reumatólogo. Recientemente, estaba haciendo llamados para obtener una cita con un reumatólogo nuevo, y la primera cita disponible era en tres meses. "Eso me indica que necesitamos más reumatólogos o que debe haber algún cambio".
Un futuro prometedor
Para acelerar ese cambio y dar lugar a un futuro en el que todos puedan obtener una cita con un reumatólogo cuando la necesitan, Lisa y su esposo Lee demuestran su espíritu navideño con una donación increíblemente generosa a la Arthritis Foundation. Es una donación que trae un desafío para otros defensores: ¡duplíquenla!
La donación de los Bloom ayudará a nuestras iniciativas por ampliar la cantidad de oportunidades de becas para reumatólogos y centrarnos en las comunidades con mayor escasez. Esperan que esta donación inspire a otras persona a donar la cantidad que puedan para "apoyar a la organización para que pueda apoyarlo a usted".
Celebrar las victorias durante las fiestas
Vivir con artritis puede ser una batalla constante, y las personas como Lisa saben que celebrar las pequeñas victorias puede ser alentador, en especial, en esta época del año.
Dado que el estrés puede exacerbar los síntomas de artritis, una victoria durante las fiestas para los Bloom es un momento tranquilo en casa horneando algo con su hijo. Con la inspiración de haber visto el programa de repostería Great British Bake Off, recientemente, se han establecido el desafío de aprender algunos platos elaborados que tardan varios días en estar listos. Ya sea una noche tranquila horneando, una caminata enérgica o una escapada, no dan nada por sentado.
La artritis es una enfermedad que altera la vida para casi 60 millones de estadounidenses como Lisa. Con una donación hoy mismo, usted puede ayudar a conquistarla. Obtenga más información y ¡ayúdenos a cumplir con el desafío de igualar la donación que ofrecieron los Bloom!
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