Abrazando a la comunidad de la artritis: Lo que apasiona a Helen King
Lea las palabras de esta extraordinaria voluntaria de la Arthritis Foundation y homenajeada del evento Camine para curar la artritis.
He encontrado un hogar, y una comunidad asombrosa, con la Arthritis Foundation. ¿Pero cómo llegué aquí? ¿Cuál es mi historia? ¿Y por qué me apasiona tanto?
Tengo el privilegio de ser la homenajeada nacional 2019 del evento Camine para curar la artritis y voluntaria campeona. Además de ser la homenajeada nacional en el evento de la caminata de este año, soy presidenta del evento Camine para curar la artritis en Philadelphia, así como capitana del mejor equipo de recaudación de fondos.
Además de estos roles, soy la capitana nacional de nuestro equipo de la Caminata Nacional de Facilitadores de Conexión de Live Yes! Soy facilitadora de un grupo de conexión de Live Yes! para personas que viven con artritis en mi comunidad de King of Prussia, Pennsylvania. Y estoy en la junta de liderazgo local de la Arthritis Foundation del este de Pennsylvania, donde presido la red de conexión de Live Yes!
Como uno de los 70 embajadores Platino de la Arthritis Foundation, defiendo a nivel estatal y federal que las personas con artritis tengan acceso a una atención óptima y a los mejores medicamentos.
Tengo 53 años y dos hijos mayores, Steven y Nick, y un asombroso empleo a tiempo completo. Ya han pasado cinco años desde que recibí el diagnóstico de artritis reumatoide.
Mi AR fue de aparición aguda y agresiva. Pasé de no tener literalmente ningún síntoma cuando me acosté una noche a no poder levantar el brazo de la cama a la mañana siguiente. Cinco años antes de eso, me hicieron una fusión espinal entre la vértebra cervical 2 y la 6, donde quitaron el disco y lo reemplazaron por hueso y una placa de titanio. Inmediatamente pensé que algo estaba terriblemente mal con mi cuello. Conseguí una cita enseguida con mi médico de la columna vertebral, al que estoy muy agradecida. No sé cómo lo supo, pero después de revisarme, dijo: "Tiene artritis reumatoide".
Todos mis valores eran anormales, mi valor de factor reumatoide era "superior a 600". (Para quienes no lo saben, el valor normal es menos de 15). Pasé meses buscando y buscando un experto médico, que es lo que a veces cuesta conseguir una cita con un reumatólogo. Y todo el tiempo en que buscas, te enfrentas a este dolor insoportable y a otros síntomas que acompañan la AR, todo mientras intentas encargarte de tu vida, tu trabajo, los hijos y otras cosas.
Finalmente, tuve la suerte de encontrar a un reumatólogo sobresaliente. Luego llevó unos cuantos meses (que parecieron muy largos) encontrar el cóctel de medicamentos adecuado. Puede ser un proceso muy largo y doloroso encontrar los medicamentos correctos, si es que los encuentras. Ningún plan de tratamiento funciona para todos. Me quedé con un medicamento de quimioterapia y uno biológico. Tuve la fortuna de que los medicamentos solo demoraran algunos meses en hacer efecto porque, emocional y mentalmente, me llevó mucho más tiempo entender lo que todo esto significaba para mí.
Ingresar en la Arthritis Foundation. Fui en busca de un grupo de apoyo para conectarme con otras personas que tuvieran artritis. No había nada en mi área, así que, lanzándome de cabeza, decidí convertirme en facilitadora y comenzar un grupo local. La Red para la Artritis de Live Yes! lo conecta con su máximo potencial a través de una red poderosa de apoyo. Al participar, las personas adquieren confianza para ayudarse a sí mismas y, a su vez, ayudar a los demás. Este ha sido un camino increíble para mí. Me encanta ayudar a las personas a encontrar su Yes!
Decidí que quería hacer más. La concientización se volvió ahora mi misión. Entonces me involucré en el evento Camine para curar la artritis, formé un excelente equipo de familiares, amigos y compañeros de trabajo y nos pusimos a recaudar fondos. En 2017, nuestro primer año, fuimos el mejor equipo de recaudación de fondos en Philadelphia. Pero para mí, no se trataba solamente de recaudar dinero; se trataba también de concientizar.
Rápidamente me di cuenta de lo poco que las personas sabían sobre la artritis, o de cuántas ideas equivocadas tenían al respecto. Deben conocer algunos de los datos sorprendentes: que uno de cada cuatro adultos de este país tiene artritis; que es la causa número 1 de discapacidad en EE. UU., que cualquier persona puede tener artritis, que la AR no es solo una enfermedad de abuelas, que no se es demasiado joven para tenerla; y que 300,000 niños en EE. UU. tienen una forma de artritis juvenil.
¡Concientizamos contando mi historia! En los últimos dos años del evento de la camina en Philadelphia, mi equipo y yo recaudamos casi $50,000, y nuestra meta para este año es $35,000.
En este momento de mi camino, mis síntomas están controlados con medicamentos, y mi dolor diario es aproximadamente 3 sobre 10. Me siento físicamente bien la mayoría de los días. Y retribuir a través de la Arthritis Foundation, como líder de conexión de Live Yes! y como capitana de equipo para la caminata, ha logrado algo asombroso en cómo me siento mental y emocionalmente. La artritis y otras enfermedades reumáticas pueden afectarnos mucho, y nuestro estado mental es tan importante como el propio dolor.
Me di cuenta de que se me daba bien contar mi historia y pedir ayuda a las personas. Entonces el siguiente paso natural para mí fue convertirme en defensora, lo cual fue fácil, y he disfrutado de difundir la misión de conquistar la artritis. A partir de allí, llevé la defensa un paso más allá y me convertí en embajadora, y el año pasado me convertí en embajadora Platino. Estuve hace poco en Washington, DC, en la Cumbre de Defensa de la Arthritis Foundation y fui coordinadora estatal para la delegación de la Commonwealth de Pennsylvania en Capitol Hill. Pasé varios días con voluntarios asombrosos que están muy abocados a nuestra misión.
La función más reciente que he aceptado en la Fundación es formar parte de nuestra junta directiva local como presidenta de la red de conexión de Live Yes! Como presidenta, ayudaré a hacer crecer esta red y los recursos para los miles de participantes en el este de Pennsylvania.
Por si no se nota, creo en la misión de la Arthritis Foundation. Realmente no sé dónde estaría en mi camino con la artritis reumatoide sin ellos. Me apasiona ser parte de esta asombrosa comunidad. La Fundación tiene recursos fantásticos y está haciendo un trabajo asombroso para muchas personas, entre ellas, yo. Me han dado la oportunidad de ser parte de algo más: una comunidad que reúne a las personas que de lo contrario podrían estar solas con su diagnóstico.
He encontrado un hogar, y una comunidad asombrosa, con la Arthritis Foundation. ¿Pero cómo llegué aquí? ¿Cuál es mi historia? ¿Y por qué me apasiona tanto?
Tengo el privilegio de ser la homenajeada nacional 2019 del evento Camine para curar la artritis y voluntaria campeona. Además de ser la homenajeada nacional en el evento de la caminata de este año, soy presidenta del evento Camine para curar la artritis en Philadelphia, así como capitana del mejor equipo de recaudación de fondos.
Además de estos roles, soy la capitana nacional de nuestro equipo de la Caminata Nacional de Facilitadores de Conexión de Live Yes! Soy facilitadora de un grupo de conexión de Live Yes! para personas que viven con artritis en mi comunidad de King of Prussia, Pennsylvania. Y estoy en la junta de liderazgo local de la Arthritis Foundation del este de Pennsylvania, donde presido la red de conexión de Live Yes!
Como uno de los 70 embajadores Platino de la Arthritis Foundation, defiendo a nivel estatal y federal que las personas con artritis tengan acceso a una atención óptima y a los mejores medicamentos.
Tengo 53 años y dos hijos mayores, Steven y Nick, y un asombroso empleo a tiempo completo. Ya han pasado cinco años desde que recibí el diagnóstico de artritis reumatoide.
Mi AR fue de aparición aguda y agresiva. Pasé de no tener literalmente ningún síntoma cuando me acosté una noche a no poder levantar el brazo de la cama a la mañana siguiente. Cinco años antes de eso, me hicieron una fusión espinal entre la vértebra cervical 2 y la 6, donde quitaron el disco y lo reemplazaron por hueso y una placa de titanio. Inmediatamente pensé que algo estaba terriblemente mal con mi cuello. Conseguí una cita enseguida con mi médico de la columna vertebral, al que estoy muy agradecida. No sé cómo lo supo, pero después de revisarme, dijo: "Tiene artritis reumatoide".
Todos mis valores eran anormales, mi valor de factor reumatoide era "superior a 600". (Para quienes no lo saben, el valor normal es menos de 15). Pasé meses buscando y buscando un experto médico, que es lo que a veces cuesta conseguir una cita con un reumatólogo. Y todo el tiempo en que buscas, te enfrentas a este dolor insoportable y a otros síntomas que acompañan la AR, todo mientras intentas encargarte de tu vida, tu trabajo, los hijos y otras cosas.
Finalmente, tuve la suerte de encontrar a un reumatólogo sobresaliente. Luego llevó unos cuantos meses (que parecieron muy largos) encontrar el cóctel de medicamentos adecuado. Puede ser un proceso muy largo y doloroso encontrar los medicamentos correctos, si es que los encuentras. Ningún plan de tratamiento funciona para todos. Me quedé con un medicamento de quimioterapia y uno biológico. Tuve la fortuna de que los medicamentos solo demoraran algunos meses en hacer efecto porque, emocional y mentalmente, me llevó mucho más tiempo entender lo que todo esto significaba para mí.
Ingresar en la Arthritis Foundation. Fui en busca de un grupo de apoyo para conectarme con otras personas que tuvieran artritis. No había nada en mi área, así que, lanzándome de cabeza, decidí convertirme en facilitadora y comenzar un grupo local. La Red para la Artritis de Live Yes! lo conecta con su máximo potencial a través de una red poderosa de apoyo. Al participar, las personas adquieren confianza para ayudarse a sí mismas y, a su vez, ayudar a los demás. Este ha sido un camino increíble para mí. Me encanta ayudar a las personas a encontrar su Yes!
Decidí que quería hacer más. La concientización se volvió ahora mi misión. Entonces me involucré en el evento Camine para curar la artritis, formé un excelente equipo de familiares, amigos y compañeros de trabajo y nos pusimos a recaudar fondos. En 2017, nuestro primer año, fuimos el mejor equipo de recaudación de fondos en Philadelphia. Pero para mí, no se trataba solamente de recaudar dinero; se trataba también de concientizar.
Rápidamente me di cuenta de lo poco que las personas sabían sobre la artritis, o de cuántas ideas equivocadas tenían al respecto. Deben conocer algunos de los datos sorprendentes: que uno de cada cuatro adultos de este país tiene artritis; que es la causa número 1 de discapacidad en EE. UU., que cualquier persona puede tener artritis, que la AR no es solo una enfermedad de abuelas, que no se es demasiado joven para tenerla; y que 300,000 niños en EE. UU. tienen una forma de artritis juvenil.
¡Concientizamos contando mi historia! En los últimos dos años del evento de la camina en Philadelphia, mi equipo y yo recaudamos casi $50,000, y nuestra meta para este año es $35,000.
En este momento de mi camino, mis síntomas están controlados con medicamentos, y mi dolor diario es aproximadamente 3 sobre 10. Me siento físicamente bien la mayoría de los días. Y retribuir a través de la Arthritis Foundation, como líder de conexión de Live Yes! y como capitana de equipo para la caminata, ha logrado algo asombroso en cómo me siento mental y emocionalmente. La artritis y otras enfermedades reumáticas pueden afectarnos mucho, y nuestro estado mental es tan importante como el propio dolor.
Me di cuenta de que se me daba bien contar mi historia y pedir ayuda a las personas. Entonces el siguiente paso natural para mí fue convertirme en defensora, lo cual fue fácil, y he disfrutado de difundir la misión de conquistar la artritis. A partir de allí, llevé la defensa un paso más allá y me convertí en embajadora, y el año pasado me convertí en embajadora Platino. Estuve hace poco en Washington, DC, en la Cumbre de Defensa de la Arthritis Foundation y fui coordinadora estatal para la delegación de la Commonwealth de Pennsylvania en Capitol Hill. Pasé varios días con voluntarios asombrosos que están muy abocados a nuestra misión.
La función más reciente que he aceptado en la Fundación es formar parte de nuestra junta directiva local como presidenta de la red de conexión de Live Yes! Como presidenta, ayudaré a hacer crecer esta red y los recursos para los miles de participantes en el este de Pennsylvania.
Por si no se nota, creo en la misión de la Arthritis Foundation. Realmente no sé dónde estaría en mi camino con la artritis reumatoide sin ellos. Me apasiona ser parte de esta asombrosa comunidad. La Fundación tiene recursos fantásticos y está haciendo un trabajo asombroso para muchas personas, entre ellas, yo. Me han dado la oportunidad de ser parte de algo más: una comunidad que reúne a las personas que de lo contrario podrían estar solas con su diagnóstico.