De recibir un diagnóstico de artritis reumatoide a correr una maratón: Katelynd Park se compromete a apoyar la lucha en pos de una cura
Hace poco más de dos años, a los 24 años, a Katelynd Park le diagnosticaron artritis reumatoide (AR). Fue un golpe devastador. Recuerda haber pensado: "¿Cómo a alguien tan joven y saludable se le puede diagnosticar esta enfermedad debilitante?". Katelynd ha avanzado mucho desde su diagnóstico. Está preparándose para correr en la maratón de Chicago de Bank of America, su primera maratón, como parte del equipo de la Arthritis Foundation el 8 de octubre. Planea mostrarle a otras personas, y a sí misma, que la AR no le impedirá vivir su vida.
Katelynd piensa que comenzó a experimentar síntomas de la artritis en la universidad. Hubo períodos en que tenía dificultad para caminar o para moverse. Culpó al estrés por ello: estaba en último año, intentaba encontrar empleo, era normal que su cuerpo estuviera estresado. Durante un examen físico, Katelynd compartió con su médico que le dolían las muñecas y que no tenía mucha movilidad. El médico de Katelynd le hizo pruebas para detectar si tenía artritis, y ella esperó los resultados con ansiedad. Le diagnosticaron artritis reumatoide.
En la primera cita con su reumatólogo, Katelynd se sintió abrumada y asustada. 17 de las articulaciones de Katelynd estaban inflamadas en el momento de su diagnóstico. Su reumatólogo hizo que comenzara un plan de tratamiento, y ha pasado por un proceso de prueba y error para encontrar un medicamento que le funcione. Actualmente, toma un par de comprimidos por día y se da dos inyecciones de medicamentos diferentes cada semana.
El tiempo después de haber recibido el diagnóstico fue muy difícil para Katelynd. Internalizó su dolor físico y emocional. A menudo, los amigos de Katelynd comentaban que no se veía enferma ni actuaba como si lo estuviera. Dado que la artritis, a menudo, es invisible a simple vista, una parte importante de la comunidad de personas con artritis experimenta este tipo de malentendido de familiares, amigos y colegas.
Ahora, Katelynd es más franca respecto de su enfermedad, quiere que las personas sepan que, algunos días, es una lucha hacer actividades normales, como abotonarse los pantalones o atarse las zapatillas. Katelynd comenzó una cuenta de Instagram para compartir su vida cotidiana con AR y se involucró con la carrera Jingle Bell Run. Las redes sociales y la Arthritis Foundation la han ayudado a sentir que no está sola.
Katelynd es la primera en decir que no es corredora. ¿Por qué decidió correr una maratón? Quiere probarse a sí misma que la artritis no la limita. "La artritis no me define, y quiero correr esta maratón", afirma Katelynd. "Algunos días regreso luego de haber corrido y lloro, no me siento bien, es muy difícil. Otros días, puedo salir y correr o caminar 18 millas, y saber que he hecho eso es un sentimiento fantástico".
El novio y mejor amigo de Katelynd correrá a su lado en la maratón. Tener un grupo de apoyo para entrenar con ella la ha alentado a seguir. Igualmente, Katelynd ha atravesado algunas dificultades en su entrenamiento. Ha sufrido varios brotes durante el entrenamiento y, recientemente, se enteró de que el producto biológico que estaba tomando ha dejado de funcionarle. Pronto podrá empezar a tomar un medicamento nuevo, pero, por ahora, sigue adelante con el entrenamiento.
Katelynd no solo corre por sí misma, sino para encontrar la cura de la artritis. "No quiero que más personas tengan que experimentar cómo es sentir dolor en todas las articulaciones del cuerpo o no poder abrir la tapa de la pasta dental o cepillarse el cabello", asegura Katelynd. "¡Quiero que haya un final para la artritis!".
Visite el sitio web del equipo de la Arthritis Foundation para brindar apoyo a Katelynd y a otras personas que correrán la maratón de Chicago de Bank of America para encontrar una cura para la artritis.
¡Le deseamos a Katelynd la mejor de las suertes en la maratón mañana! ¡Eres una verdadera Campeona del sí!
Katelynd piensa que comenzó a experimentar síntomas de la artritis en la universidad. Hubo períodos en que tenía dificultad para caminar o para moverse. Culpó al estrés por ello: estaba en último año, intentaba encontrar empleo, era normal que su cuerpo estuviera estresado. Durante un examen físico, Katelynd compartió con su médico que le dolían las muñecas y que no tenía mucha movilidad. El médico de Katelynd le hizo pruebas para detectar si tenía artritis, y ella esperó los resultados con ansiedad. Le diagnosticaron artritis reumatoide.
En la primera cita con su reumatólogo, Katelynd se sintió abrumada y asustada. 17 de las articulaciones de Katelynd estaban inflamadas en el momento de su diagnóstico. Su reumatólogo hizo que comenzara un plan de tratamiento, y ha pasado por un proceso de prueba y error para encontrar un medicamento que le funcione. Actualmente, toma un par de comprimidos por día y se da dos inyecciones de medicamentos diferentes cada semana.
El tiempo después de haber recibido el diagnóstico fue muy difícil para Katelynd. Internalizó su dolor físico y emocional. A menudo, los amigos de Katelynd comentaban que no se veía enferma ni actuaba como si lo estuviera. Dado que la artritis, a menudo, es invisible a simple vista, una parte importante de la comunidad de personas con artritis experimenta este tipo de malentendido de familiares, amigos y colegas.
Ahora, Katelynd es más franca respecto de su enfermedad, quiere que las personas sepan que, algunos días, es una lucha hacer actividades normales, como abotonarse los pantalones o atarse las zapatillas. Katelynd comenzó una cuenta de Instagram para compartir su vida cotidiana con AR y se involucró con la carrera Jingle Bell Run. Las redes sociales y la Arthritis Foundation la han ayudado a sentir que no está sola.
Katelynd es la primera en decir que no es corredora. ¿Por qué decidió correr una maratón? Quiere probarse a sí misma que la artritis no la limita. "La artritis no me define, y quiero correr esta maratón", afirma Katelynd. "Algunos días regreso luego de haber corrido y lloro, no me siento bien, es muy difícil. Otros días, puedo salir y correr o caminar 18 millas, y saber que he hecho eso es un sentimiento fantástico".
El novio y mejor amigo de Katelynd correrá a su lado en la maratón. Tener un grupo de apoyo para entrenar con ella la ha alentado a seguir. Igualmente, Katelynd ha atravesado algunas dificultades en su entrenamiento. Ha sufrido varios brotes durante el entrenamiento y, recientemente, se enteró de que el producto biológico que estaba tomando ha dejado de funcionarle. Pronto podrá empezar a tomar un medicamento nuevo, pero, por ahora, sigue adelante con el entrenamiento.
Katelynd no solo corre por sí misma, sino para encontrar la cura de la artritis. "No quiero que más personas tengan que experimentar cómo es sentir dolor en todas las articulaciones del cuerpo o no poder abrir la tapa de la pasta dental o cepillarse el cabello", asegura Katelynd. "¡Quiero que haya un final para la artritis!".
Visite el sitio web del equipo de la Arthritis Foundation para brindar apoyo a Katelynd y a otras personas que correrán la maratón de Chicago de Bank of America para encontrar una cura para la artritis.
¡Le deseamos a Katelynd la mejor de las suertes en la maratón mañana! ¡Eres una verdadera Campeona del sí!