Pódcast «Live Yes! With Arthritis»: Episodio 4 - You Want Me to Exercise?
Debe ejercitarse. ¿Le resulta familiar? Lo sé. Lo entiendo perfectamente. Se despertó esta mañana con dolor. Sacar fuerzas para levantarse de la cama parecía imposible. Y prepararse para su día era como si acabara de correr unos 5K. Entiendo. También tengo artritis y sé lo que está pensando. «Espera, ¿no acabo de despertarme? ¡Debería tener más energía! ¿Qué hice mientras dormía para sentirme tan agotado? Claro, es cierto. No dormí muy bien. Mi «dolorsomnio» no me dejó dormir bien. ¿Y ahora me dice que vaya a hacer ejercicio? ¿Se supone que eso aliviará mi dolor de artritis?»La respuesta breve es: ¡SÍ! Lo cierto es que cada vez más investigaciones demuestran que el ejercicio es una de las mejores formas de tratar nuestra artritis. Sin embargo, para los que vivimos con ella a toda hora, eso podría ser una de las últimas cosas que deseamos o sentimos que podemos hacer. Lo he vivido. Lo he hecho. He pasado por lo mismo una y otra vez. Como paciente, sé lo difícil que es moverse cuando se tiene dolor. Como terapeuta ocupacional, sé lo difícil que es motivar a alguien a moverse, y comprendo que mantenerse físicamente activo hace una gran diferencia en nuestra salud.
He vivido años más activos que otros: he hecho senderismo, he completado una carrera de 10K, he practicado ciclismo e incluso, he escalado una montaña de 14,000 pies. Y he tenido años, como el pasado, en los que mi nivel de actividad física ha disminuido, a causa de una recuperación complicada de una cirugía, el cambio de biológicos para controlar mi AR y el cambio a un trabajo más sedentario. Noto la diferencia. Tengo que mover más mi cuerpo. Pero, ¿cómo?
¡Qué emoción me causa nuestro episodio del pódcast «Live Yes! With Arthritis» sobre la artritis y la actividad física! Julie (copresentadora y paciente de artritis también), y yo conversamos con la doctora Kim Huffman, reumatóloga e investigadora del Duke University Medical Center, quien es una experta en la artritis y la actividad física. Disfruté nuestra conversación porque la doctora Huffman confirma lo que intento transmitir a mis colegas en el campo de la fisioterapia y terapia ocupacional: redefinir el «ejercicio» como «actividad física» y hacer que sea motivador para el paciente. Hay dos elementos principales para estar y permanecer activos.
No se trata solo de subirse a la caminadora o levantar pesas. Se trata de mover el cuerpo y mantenerse activo. Encuentre algo que le haga feliz, como una sesión de baile por la mañana, sacar a su perro a pasear, andar en bicicleta con sus hijos o, en mi caso, simplemente caminar al aire libre por un sendero o hacer senderismo. Incorpore pequeñas dosis de actividad física a su rutina diaria y recuerde que incluso las tareas cotidianas que lo hacen moverse, como ir hasta el buzón, hacer las compras o pasar la aspiradora, cuentan como actividad física.
Estar físicamente activo puede ayudarlo a aliviar su dolor de artritis y algunos síntomas. También lo inspirará la historia de Julie, que pasó de no tener una bicicleta a recorrer un viaje épico en bicicleta por la costa de California. Si tiene miedo de empezar o no sabe qué puede hacer, escuche este episodio sobre la artritis y la actividad física para conocer algunas ideas y consejos de nuestro experto, y entender mejor por qué la actividad física es primordial en nuestros planes de tratamiento.
Por Rebecca Gillett, MS OTR/L
He vivido años más activos que otros: he hecho senderismo, he completado una carrera de 10K, he practicado ciclismo e incluso, he escalado una montaña de 14,000 pies. Y he tenido años, como el pasado, en los que mi nivel de actividad física ha disminuido, a causa de una recuperación complicada de una cirugía, el cambio de biológicos para controlar mi AR y el cambio a un trabajo más sedentario. Noto la diferencia. Tengo que mover más mi cuerpo. Pero, ¿cómo?
¡Qué emoción me causa nuestro episodio del pódcast «Live Yes! With Arthritis» sobre la artritis y la actividad física! Julie (copresentadora y paciente de artritis también), y yo conversamos con la doctora Kim Huffman, reumatóloga e investigadora del Duke University Medical Center, quien es una experta en la artritis y la actividad física. Disfruté nuestra conversación porque la doctora Huffman confirma lo que intento transmitir a mis colegas en el campo de la fisioterapia y terapia ocupacional: redefinir el «ejercicio» como «actividad física» y hacer que sea motivador para el paciente. Hay dos elementos principales para estar y permanecer activos.
No se trata solo de subirse a la caminadora o levantar pesas. Se trata de mover el cuerpo y mantenerse activo. Encuentre algo que le haga feliz, como una sesión de baile por la mañana, sacar a su perro a pasear, andar en bicicleta con sus hijos o, en mi caso, simplemente caminar al aire libre por un sendero o hacer senderismo. Incorpore pequeñas dosis de actividad física a su rutina diaria y recuerde que incluso las tareas cotidianas que lo hacen moverse, como ir hasta el buzón, hacer las compras o pasar la aspiradora, cuentan como actividad física.
Estar físicamente activo puede ayudarlo a aliviar su dolor de artritis y algunos síntomas. También lo inspirará la historia de Julie, que pasó de no tener una bicicleta a recorrer un viaje épico en bicicleta por la costa de California. Si tiene miedo de empezar o no sabe qué puede hacer, escuche este episodio sobre la artritis y la actividad física para conocer algunas ideas y consejos de nuestro experto, y entender mejor por qué la actividad física es primordial en nuestros planes de tratamiento.
Por Rebecca Gillett, MS OTR/L