Hiperostosis esquelética idiopática difusa

La hiperostosis esquelética idiopática difusa (DISH, sigla en inglés) es un tipo de artritis que afecta los tendones y ligamentos, principalmente alrededor de la columna vertebral. Estas cintas de tejido pueden endurecerse (calcificares) y formar bultos llamados espolones óseos en los sitios de unión con los huesos. Esta enfermedad también puede formar espolones óseos en la cadera, en las rodillas, en los hombros, en los pies y en las manos, además de endurecer los huesos de todo el cuerpo. 

La hiperostosis esquelética idiopática difusa, también llamada enfermedad de Forestier, a menudo no provoca síntomas y por lo general se detecta cuando se hace una prueba de diagnóstico por imágenes debido a otro problema. Algunas personas tienen dolor y rigidez en la espalda que pueden empeorar con el tiempo.  

Muchas personas que tienen esta enfermedad no presentan síntomas. Cuando hay síntomas, pueden incluir lo siguiente: 

• Rigidez que suele ser peor a la mañana. 
• Dolor, en especial en el cuello o en la parte superior de la espalda (columna cervical o torácica). 
• Amplitud de movimiento limitada de la espalda. 
• Ronquera o dificultad para tragar cuando se comprimen los nervios del cuello. 
• Hormigueo o entumecimiento de las piernas cuando se comprimen los nervios de la parte baja de la espalda (zona lumbar). 
• Posible parálisis debido a la compresión de la médula espinal. 

Pueden aparecer problemas más graves que el dolor de cuello o de espalda.  Los espolones óseos en el cuello pueden ejercer presión sobre el esófago, lo que dificulta tragar. También pueden provocar voz ronca o apnea del sueño, un problema que consiste en roncar y dejar de respirar repetidas veces durante el sueño.  Esta enfermedad también puede aumentar el riesgo de fractura de la columna vertebral.  

Nadie sabe con certeza qué es lo que causa la hiperostosis esquelética idiopática difusa. Al igual que la mayoría de las enfermedades, probablemente sea una combinación de factores genéticos, ambientales, metabólicos y posiblemente mecánicos. La probabilidad de tener esta enfermedad aumenta si usted: 

• Es hombre. 
• Es mayor de 50 años. 
• Tiene diabetes u otra afección que aumenta la concentración de insulina, como prediabetes u obesidad. 
• Ha tomado el medicamento para el acné isotretinoína (Amnesteem, Claravis y otras marcas). La isotretinoína es un derivado sintético de la vitamina A. No está claro si la vitamina A proveniente de alimentos o suplementos también podría ser un factor. 
• Es miembro de la tribu pima. 
• Tiene características anatómicas vertebrales fuera de lo común.   
• Reiteradamente, mueve o levanta objetos pesados, aunque esta conexión es controvertida. 
• Ninguno de estos factores causa la enfermedad por sí solo. Por ejemplo, el simple hecho de tomar isotretinoína no provoca la formación de espolones óseos. Pero si además es hombre, tiene diabetes y hace mucho esfuerzo físico en su trabajo, las probabilidades de padecer la enfermedad son mayores. 

Por lo general, los médicos diagnostican la hiperostosis esquelética idiopática difusa a partir de un examen físico y pruebas de diagnóstico por imágenes, como radiografías, tomografías computarizadas y resonancias magnéticas. Pueden hacerse las mismas pruebas para descartar otros problemas con síntomas similares. 

 
 

La hiperostosis esquelética idiopática difusa no tiene cura, pero ciertos tratamientos pueden aliviar los síntomas y a menudo impedir que la enfermedad empeore. 

• Ejercicio y fisioterapia. Son fundamentales para controlar el dolor de espalda y mejorar la rigidez y la amplitud de movimiento. Nadar resulta especialmente beneficioso porque permite ejercitar todo el cuerpo sin el riesgo de lesionarse.
• Calor. El tratamiento térmico puede ayudar a aliviar el dolor y la rigidez que aparecen temprano a la mañana. 
• Control de peso y del azúcar en sangre (glucemia). Debido a que esta enfermedad a menudo está asociada con la obesidad y la diabetes, es fundamental mantener un peso y una concentración de azúcar en sangre (glucemia) saludables. Tratar estas afecciones es lo más cercano a una cura para la hiperostosis esquelética idiopática difusa. 
• Ortesis (plantillas ortopédicas especiales). Pueden facilitar la caminata si tiene espolones óseos en los talones. 
• Analgésicos.El paracetamol y otros medicamentos antiinflamatorios (NSAID) como el ibuprofeno pueden utilizarse para aliviar el dolor cuando sea necesario. Si el ejercicio y la fisioterapia no alivian el dolor intenso, las inyecciones de corticoesteroides pueden ser una opción. El objetivo de las inyecciones es ayudar a que la persona retome el ejercicio. 
• Cirugía. Esta opción se consideraría en casos raros, en los que los espolones óseos comprimen la médula espinal o afectan la capacidad de tragar.   

Obtenga más información sobre los medicamentos que se utilizan para tratar la hiperostosis esquelética idiopática difusa en la guía de medicamentos para la artritis.

Junto con las indicaciones del médico, hacer suficiente actividad física y fortalecer los músculos que sostienen la columna vertebral, podrá controlar la enfermedad de maneras adicionales. Practicar hábitos de estilo de vida saludables también ayuda a mejorar el estado de salud general y a controlar el dolor. Tenga una alimentación nutritiva y balanceada que evite los alimentos azucarados, grasos y procesados. Si actualmente fuma, pídale al médico ayuda para dejar el hábito. Además, cuide su salud mental y emocional para poder sobrellevar los desafíos que plantea esta afección. El autocontrol consiste en las decisiones que toma cada día para vivir bien y mantener un buen estado de salud.