Relájese, recargue energía y cuide sus articulaciones 

El ejercicio es una de las mejores terapias sin medicamentos para el dolor articular. Pero a veces, los músculos y las articulaciones doloridos necesitan algunos cuidados adicionales después del entrenamiento. El tratamiento térmico promueve la circulación sanguínea y ayuda a aliviar el dolor y la tensión musculares. Pruebe piscinas climatizadas o piscinas de hidromasaje, compresas calientes o bolsas que pueden calentarse en el microondas. No hay nada mejor que un baño caliente antes de acostarse para aliviar el dolor y ayudarlo a dormir bien.

Aplicar frío a las articulaciones doloridas también puede ayudar a reducir el dolor y la hinchazón. Use una compresa fría, una bolsa de hielo envuelta en una toalla o una bolsa de verduras congeladas para un tratamiento con frío rápido y fácil. También puede probar un "masaje helado" y frotarse el hielo directamente sobre una articulación dolorida.

Si tiene dolor leve, un analgésico tópico que incluya ingredientes como la capsaicina, el mentol, el árnica o salicilatos, puede resultarle de ayuda. Si se aplican en el lugar específico del dolor, los productos tópicos no causan problemas estomacales que sí pueden presentarse con algunos analgésicos de venta libre. 

Los dispositivos de asistencia como férulas de mano o dedo, rodilleras articuladas y bastones pueden ayudar a quitar la tensión adicional sobre las articulaciones doloridas.  Estos aparatos pueden ayudarlo a protegerse las articulaciones de manera proactiva cuando sabe que tendrá un día ajetreado, con mucho movimiento y actividad.

El autocuidado no solo se aplica al cuerpo. También significa ocuparse de la mente y del espíritu. Se ha comprobado que la meditación reduce el dolor, alivia el estrés, la ansiedad y la depresión, al tiempo que mejora el estado funcional y la calidad de vida. Una vez que mira un video por Internet o asiste a una clase, la meditación es algo que puede hacer por su cuenta en cualquier lugar. 

Durante miles de años, el yoga y el tai chi han ayudado a las personas a aliviar el dolor y el estrés, además de mejorar el estado de ánimo y los hábitos de sueño. Estas prácticas para la mente y el cuerpo combinan el ejercicio físico, la respiración y la meditación a fin de mejorar la salud tanto física como mental. Encuentre a un instructor que pueda modificar las posturas en caso de que tenga problemas articulares que le impidan hacer algunas de ellas. 

Puede ser difícil al principio, pero después de un tiempo, le tomará la mano. Decir que no, tanto a personas como a ciertas obligaciones, le permite decir que sí al tiempo extra para usted. Podrá equilibrar mejor la actividad con el descanso cuando tome el control del ritmo de su vida.  Sus articulaciones se lo agradecerán.   

Encuentre más maneras de aliviar el dolor y cuidar el cuerpo y la mente aquí.