Guías clínicas del ACR sobre vacunas contra el COVID-19
El American College of Rheumatology ha publicado las pautas de la vacuna contra el COVID-19 específicamente para pacientes con enfermedades reumáticas y musculoesqueléticas.
Resumen de las recomendaciones
Guía clínica del ACR de las vacunas contra el COVID-19 para pacientes con enfermedades reumáticas y musculoesqueléticas
Fecha de actualización: 2/11/22
El American College of Rheumatology (ACR) actualizó su guía clínica de vacunas para pacientes con enfermedades reumáticas y musculoesqueléticas (RMD). Si bien cada paciente es único, el grupo de trabajo de las guías clínicas del ACR sobre vacunas contra el COVID-19 desarrolló recomendaciones como un marco para abordar el manejo de la enfermedad en el contexto de la vacunación contra el virus SARS-CoV-2.
La guía del ACR no está diseñada para reemplazar el juicio de los proveedores de atención de reumatología ni para anular los valores y preferencias de sus pacientes.
Los miembros del grupo de trabajo señalaron que la guía se proporciona como parte de un "documento vivo", que reconoce la evidencia en rápida evolución y la necesidad de un monitoreo continuo de la información sobre las vacunas de ARNm disponibles y otros tipos de vacunas contra el COVID-19 en desarrollo. La guía debe considerarse condicional o provisional. Para más detalles, haga clic aquí.
Conclusiones clave
Factores de riesgo de COVID-19
- Los pacientes con enfermedades reumáticas inflamatorias autoinmunes (AIIRD) (por ejemplo, AR, AP, EaAx, gota, lupus, vasculitis) tienen un mayor riesgo de hospitalización por COVID-19 y peores resultados en comparación con la población general.
- En función de su riesgo de COVID-19, los pacientes con AIIRD deberían ser un grupo prioritario para el acceso a la vacuna antes que la población general de edad y sexo similar.
Consideraciones de vacunas
Independientemente de si han tenido COVID-19, las personas que están moderada o gravemente inmunodeprimidas por una afección que compromete el sistema inmunitario, como enfermedades reumáticas inflamatorias autoinmunes, o que toman medicamentos inmunodepresores para tratarla, deben vacunarse. Estas recomendaciones se aplican a los niños de 5 años en adelante para la vacuna Pfizer/BioNTech, que está autorizada para esas edades, y a los mayores de 12 años para la vacuna Moderna, que está autorizada para esas edades.
- Para los pacientes que aún no se vacunaron, se recomienda cualquiera de las vacunas de ARNm en lugar de la vacuna J&J de dosis única No existe una recomendación para una vacuna de ARNm sobre otra.
- Según la evidencia hasta la fecha, no hay razón para esperar que los efectos adversos de las vacunas superen los beneficios para los pacientes con RMD.
- No se conocen contraindicaciones adicionales para las vacunas COVID-19 más allá de las alergias conocidas a los ingredientes de la vacuna.
- Los pacientes de reumatología que toman medicamentos inmunodepresores sistémicos pueden experimentar una respuesta menor a una vacuna contra el COVID-19 y es posible que la protección no dure tanto como para la población general. Sin embargo, es muy probable que la vacuna brinde una protección significativa, y los pacientes con RMD deben vacunarse.
- Se recomienda una tercera dosis de la vacuna Pfizer-BioNTech contra el COVID-19 (edad ≥ 12 años) o la vacuna Moderna contra el COVID-19 (edad ≥ 18 años) al menos 28 días después de completar la serie de vacunas de ARNm de 2 dosis para pacientes que reciban cualquier terapia inmunodepresora o inmunomoduladora, excepto hidroxicloroquina.
- Existe un riesgo teórico de que los pacientes con AIIRD experimenten un brote de la enfermedad después de recibir una vacuna contra el COVID-19, pero los beneficios de la protección de la vacuna superan los riesgos.
- Los proveedores de atención médica no deben ordenar rutinariamente ninguna prueba de laboratorio (p. ej., pruebas de anticuerpos para IgM y/o IgG para proteínas spike o nucleocápside) para evaluar la inmunidad al COVID-19 después de la vacunación, ni para evaluar la necesidad de vacunación en una persona que aún no ha sido vacunada.
Horario de administración del medicamento
- Puede ser útil modificar el horario de la administración de los siguientes medicamentos, en consulta con un reumatólogo, cuando se sigue un calendario de vacunación contra el COVID-19:
- Metotrexato, micofenolato, ciclofosfamida
- Inhibidores de JAK: baricitinib (Olumiant), tofacitinib (Xeljanz), upadacitinib (Rinvoq)
- Abatacept (Orencia), rituximab (Rituxan, Ruxience, Truxim)
Suponiendo que la enfermedad es estable, no use paracetamol ni ningún NSAID 24 horas antes de la vacunación (no hay restricciones de uso después de la vacunación para tratar los síntomas).
El objetivo sería maximizar la respuesta a la vacuna; no se plantearon problemas de seguridad relacionados con la medicación o el momento de la vacunación.
Dosis de refuerzo y momento adecuado
A excepción de las terapias con glucocorticoides y anticitocinas (IL-17, IL-12/23, IL-23, IL-1R, IL-6R), suspenda todos los medicamentos inmunomoduladores o inmunodepresores durante 1 a 2 semanas después de recibir la vacunación de refuerzo, asumiendo que la actividad de la enfermedad lo permita. Los pacientes que toman rituximab u otros medicamentos anti-CD20 deben hablar sobre el momento óptimo con su proveedor de reumatología antes de proceder con la vacunación de refuerzo.
ACR ahora recomienda que las personas inmunodeprimidas también reciban una vacuna de refuerzo además de la serie "primaria", de acuerdo con los lineamientos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. Los refuerzos difieren de las vacunas primarias en la dosificación.
- Aquellos que recibieron las tres vacunas de Moderna deben recibir un refuerzo al menos cinco meses después de la tercera vacuna.
- Aquellos que recibieron vacunas de Pfizer/BioNTech y tienen entre 12 y 17 años deben recibir un refuerzo después de cinco meses; las personas mayores de 18 años deben recibir una cuarta vacuna después de cinco meses.
- Aquellos que recibieron una primera vacuna de J&J y siguieron con un refuerzo de J&J o ARNm al menos dos meses después, deben recibir un refuerzo dos meses después de la segunda vacuna.
Tratamientos posteriores a la exposición
Las recomendaciones de ACR también abordan el tratamiento con anticuerpos monoclonales para aquellas personas inmunodeprimidas que han estado expuestas al virus. Sin embargo, ninguno de estos tratamientos ha sido autorizado por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) contra la variante ómicron, que actualmente es la cepa predominante del virus que circula en los Estados Unidos, porque se ha encontrado que son mayormente ineficaces contra esta variante. Sin embargo, otras terapias todavía están disponibles.
ACR recomienda que los pacientes inmunodeprimidos de alto riesgo reciban tratamiento con anticuerpos monoclonales, cuando estén disponibles y sean efectivos, una vez que hayan estado expuestos al coronavirus o una vez que comiencen a mostrar síntomas.
Conclusión
Después de la vacunación contra el COVID-19, los pacientes con RMD deben seguir todos los lineamientos de salud pública, incluido el uso de mascarillas, la higiene de las manos, el distanciamiento físico y otras medidas preventivas. Para obtener más información sobre la seguridad de la vacuna contra el COVID-19, los riesgos y las interacciones entre medicamentos, haga clic aquí.