Combata el dolor provocado por la artritis sin pastillas 

Según el Centro Nacional de Estadísticas de Salud, 76.2 millones, o el 26% de los estadounidenses, padecen dolor crónico —y más de la mitad de ellos tienen alguna forma de artritis o condición relacionada. La pregunta que nos asalta a muchos es la siguiente: ¿se puede hacer algo para aliviar el dolor de la artritis además de tomar pastillas? 

A pesar de que los medicamentos para el dolor de venta libre y recetados pueden ser eficaces si se los utiliza correctamente, existen posibles riesgos siempre que se toma una pastilla. Esta es la razón por la cual una gran cantidad de personas desean explorar terapias alternativas para el alivio del dolor. Existen una gran variedad de opciones —desde estimulación eléctrica hasta meditación, cremas de uso tópico y calzado. 

Numerosos expertos recomiendan estas opciones: 

1. Medicamentos de uso tópico

De qué se trata: geles, cremas y parches que se aplican sobre la piel y suministran bloqueadores de los canales de sodio, tales como lidocaína o prilocaína. También se están popularizando los AINE (antiinflamatorios no esteroideos) bajo receta que vienen en gotas, geles, aerosol o parches. Las cremas de venta libre más populares para aliviar el dolor incluyen ingredientes tales como la capsaicina, el mentol o el alcanfor.

Cómo funcionan: los bloqueadores de los canales de sodio actúan adormeciendo las terminaciones nerviosas cercanas a la piel. «Los AINE de uso tópico actúan llegando al fluido articular y disminuyendo proteínas inflamatorias, tales como las prostaglandinas», afirma el doctor David N. Maine, director del Centro de Medicina Intervencionista del Dolor del Centro Médico Mercy de Baltimore. «Tienen un efecto antiinflamatorio directo». La capsaicina produce una leve sensación de hormigueo y ardor, y actúa bloqueando las señales de dolor que llegan a los nervios. Los tópicos que contienen mentol o alcanfor se denominados contrairritantes. No afectan las señales de dolor ni la inflamación, sino que actúan produciendo una sensación de enfriamiento tendiente a distraer del dolor.

Dolor para el que funcionan bien: los bloqueadores de los canales de sodio funcionan mejor para tratar trastornos nerviosos, tales como la neuropatía diabética o el dolor neuropático. Los AINE de uso tópico ayudan a aliviar el dolor y la inflamación comunes en la artritis. La capsaicina es recomendada para el dolor en los nervios, así como también para el de las articulaciones.

Riesgos: los médicos creen que los AINE de uso tópico pueden plantear menos riesgos cardiovasculares y gastrointestinales que los AINE orales, ya que los de uso tópico se absorben localmente en lugar de hacerlo en todo el cuerpo. El Dr. Maine afirma lo siguiente: «los efectos colaterales gastrointestinales son raros en comparación con los no esteroideos orales». Aproximadamente del 10 al 15% de los pacientes presentan algún tipo de reacción, generalmente relacionada con la piel, entre las que se incluyen erupciones, irritación o picazón.   

2. Calzado adecuado

De qué se trata: según un  estudio efectuado por investigadores del Centro Médico de la Universidad Rush en 31 personas con artrosis, el calzado plano y flexible, como por ejemplo chancletas y zapatillas deportivas (en el estudio se utilizaron las zapatillas Puma H-Street), redujo la fuerza ejercida sobre las articulaciones de la rodilla entre un 11 y un 15%, en comparación con los zuecos y el calzado especial para caminar. 

Cómo funcionan: «una mayor [fuerza] sobre las articulaciones de la rodilla se asocia con dolor», afirma la autora principal y reumatóloga Najia Shakoor, MD. «Así que, si ejerce menos [fuerza], debería tener menos dolor». 

Dolor para el que funcionan bien: usar zapatos flexibles puede aliviar mejor el dolor provocado por la artrosis (OA) de rodilla y quizás de cadera. 

Riesgos: a pesar de los resultados del estudio, el Dr. Shakoor se apresura a agregar que las chancletas pueden causar otros problemas tales como fascitis plantar, siendo esta la inflamación del tejido conectivo situado a lo largo de la planta del pie. Y pueden exponer a las personas con artrosis a un mayor riesgo de caídas. «Los zapatos planos, flexibles y cerrados con soporte para el arco son una buena opción», añade. 

3. Inyección de esteroides

De qué se trata: corticoesteroides, tales como la cortisona, la hidrocortisona y la prednisona, son versiones sintéticas de la hormona cortisol, la cual ayuda a reducir la inflamación. 

Cómo funciona: el médico inyectará un esteroide directamente en la articulación a fin de calmar la inflamación, afirma el doctor Allen D. Boyd Jr, jefe del Departamento de Cirugía Reconstructiva para Adultos y Reemplazo Total de Articulaciones en el Centro Médico de la Universidad de Rochester, en New York. 

Dolor para el que funciona bien: «una inyección de esteroides hará que casi cualquier persona [con dolor articular inflamatorio] se sienta mejor durante días o meses, o quizás más tiempo», afirma el Dr. Boyd. «Es beneficiosa para cualquier persona con artritis inflamatoria y puede ser utilizada de forma generalizada, incluso para tratar la artritis juvenil (AJ)». 

Riesgos: el doctor Boyd afirma que se puede repetir una inyección de esteroides de dos a tres veces al año. Más de eso puede provocar que los ligamentos y tendones se vuelvan más frágiles, y puedan romperse. Y con cualquier inyección existe un pequeño riesgo de contraer una infección.   

4. Ejercicio/fisioterapia

De qué se trata: la fisioterapia es un tratamiento que utiliza ejercicios diseñados para mejorar la postura, la fuerza, la funcionalidad, el rango de movimiento y reducir el dolor. También incrementa la energía y mejora el estado de ánimo. 

Cómo funciona: un paciente que nunca antes haya hecho ejercicio podría comenzar un programa de fortalecimiento, estiramiento y aeróbicos visitando a un fisioterapeuta dos veces por semana durante 12 semanas. «Les pedimos a los pacientes que hagan todo lo posible para ejercitarse de dos a tres veces por semana durante 30 a 40 minutos cada vez», afirma Padmanabhan. 

Dolor para el que funciona bien: el ejercicio funciona para cualquier tipo de artritis, incluyendo la OA, la artritis reumatoide (AR) y la espondilitis anquilosante. 

Riesgos: siempre es riesgoso excederse con el ejercicio . No haga ejercicio si siente dolor. Las actividades de alto impacto, tales como correr y saltar, pueden empeorar la salud de las articulaciones e incrementar el riesgo de lesiones, por lo que debería asegurarse de consultar con su médico o fisioterapeuta antes de probarlas. Podría ser más beneficioso practicar deportes de bajo impacto, tales como natación, gimnasia acuática y ciclismo. 

5.Calor/frío

De qué se trata: puede aplicarse calor con almohadillas térmicas, compresas calientes, parches térmicos, baños tibios o incluso cera caliente. La terapia de frío puede aplicarse en forma de compresas frías, bolsas de hielo o paquetes de verduras congeladas. 

Cómo funciona: «los espasmos musculares pueden causar una constricción básica del flujo sanguíneo», afirma Padmanabhan. «El calor funciona aumentando el flujo sanguíneo hacia la zona [dolorida]. También relaja los músculos». Las sensaciones de frío viajan a lo largo de las grandes fibras nerviosas, sustituyendo las sensaciones de dolor que viajan a lo largo de las fibras más pequeñas. El frío también reduce la hinchazón y la inflamación al constreñir los vasos sanguíneos. 

Dolor para el que funciona bien: «el calor funciona mejor [que el frío] para el dolor provocado por la artrosis», afirma Padmanabhan. Aplique calor dos o tres veces al día durante 15 minutos por vez. Los baños de cera de parafina tibia pueden ser útiles para los pacientes con AR, especialmente en las manos — siempre y cuando no estén experimentando un brote. El frío funciona mejor para la inflamación causada por lesiones tales como esguinces y distensiones y desgarros de músculos y ligamentos. Aplique compresas frías de dos a cuatro veces al día durante 15 minutos por vez hasta que el dolor y la hinchazón disminuyan. 

Riesgos: el calor puede agravar una lesión aguda, como por ejemplo un esguince o una distensión muscular, empeorando la hinchazón y la inflamación. Y excederse con el calor o el frío puede causar quemaduras; nunca se deben aplicar sobre la piel desnuda.   

6. Inyección en puntos gatillo

De qué se trata: el médico inyecta anestesia, como por ejemplo lidocaína, o anestesia más un corticoesteroide, en el músculo. 

Cómo funciona: «los puntos gatillo son manojos de músculo dolorosos», afirma el doctor Mehul J. Desai, director de Medicina del Dolor y Servicios No Operativo para la Columna Vertebral del Hospital Universitario George Washington de Washington, D.C. «Introducir una aguja en el punto gatillo hace que el tejido muscular vuelva a su estructura normal. Una inyección puede [aliviar el dolor] durante semanas o meses». Estirar y ejercitar el músculo después ayuda a que el efecto de la inyección dure más tiempo. 

Dolor para el que funciona bien: puede funcionar para cualquier tipo de dolor muscular causado por la artritis, pero no para la fibromialgia, afirma el doctor Desai. 

Riesgos: no debería colocarse estas inyecciones más de tres o cuatro veces al año. Demasiadas crearán tejido cicatrizal, el cual puede cambiar la capacidad del músculo para contraerse, y causar finalmente más dolor. 

7. Meditación

De qué se trata: la meditación es la práctica destinada a desarrollar una concentración o enfoque profundo. La doctora Tanya Edwards, directora del Centro de Medicina Integral del Instituto de Bienestar de la Clínica Cleveland, define la meditación como un conjunto de técnicas de relajación y meditación de mente y cuerpo, trabajo de respiración, relajación progresiva e imágenes guiadas —que ayudan a disminuir el dolor. 

Cómo funciona: según la Dra. Edwards, el estrés produce sustancias químicas en el cuerpo que aumentan la inflamación. «Con las técnicas de relajación, se reduce el estrés y, por lo tanto, disminuyen la inflamación y el dolor», afirma. La meditación también relaja los músculos que se tensan con el dolor. La Dra. Edwards sugiere meditar durante 20 minutos una o dos veces al día. Para los momentos de dolor agudo, también recomienda «minutos de meditación». Por ejemplo, respirar profundamente de cuatro a cinco veces, contando hasta 10 con cada inhalación y exhalación. «El simple hecho de hacer eso cuatro o cinco veces al día puede ayudar a disminuir la depresión y mejorar la perspectiva», afirma. 

Dolor para el que funciona bien: «funciona para cualquier tipo de dolor», afirma la doctora Edwards. Numerosos estudios han descubierto que la práctica regular de la meditación reduce la respuesta del cerebro al dolor. 

Riesgos: ninguno. 

8. Bloqueo neural

De qué se trata: el médico inyecta un anestésico local, o una mezcla de anestésico local más un esteroide, en un nervio. Los bloqueos neurales se utilizan para bloquear el dolor y para ayudar a los médicos a localizar el origen de ciertos dolores. 

Cómo funciona: «el anestésico detiene la conducción [de señales] a lo largo del nervio, y los esteroides ayudan a [calmar] el tejido inflamatorio», afirma el doctor Desai. 

Dolor para el que funciona bien: «un bloqueo se utiliza más comúnmente cuando el dolor está situado en la columna vertebral y se desplaza hacia los brazos o las piernas", afirma el Dr. Desai. 

Riesgos: la infección y la hemorragia son dos posibilidades. Y es posible que el médico se dirija a un nervio equivocado, lo cual podría provocar problemas de movimiento o sensibilidad en las zonas afectadas por ese nervio.  

9. Acupuntura

De qué se trata: la acupuntura es una antigua terapia china que consiste en colocar pequeñas agujas a lo largo de los meridianos del cuerpo para liberar la energía atrapada, o chi. 

Cómo funciona: «la colocación de las agujas incrementa la producción de endorfinas, sustancias similares a la morfina, las cuales son analgésicos naturales», afirma la doctora Edwards. «También puede aumentar el flujo sanguíneo hacia la zona, lo cual ayuda a deshacerse de subproductos, tales como el ácido láctico, que causan dolor».  ¿Le teme a las agujas? Pruebe la acupresión: consiste en utilizar los dedos, los nudillos y las palmas de las manos para aplicar presión en el lugar donde siente dolor. 

Dolor para el que funciona bien: «es apropiada para cualquier tipo de dolor provocado por la artritis —casi cualquier tipo de dolor», afirma la Dra. Edwards. 

Riesgos: si está tomando anticoagulantes, existe un mayor riesgo de hemorragia, y si está recibiendo quimioterapia, puede correr mayor riesgo de contraer una infección. 

10. Denervación de la articulación facetaria

De qué se trata: el médico utiliza energía térmica de radiofrecuencia para destruir los nervios dolorosos que irrigan las articulaciones facetarias, o las articulaciones pareadas situadas en la parte posterior de la columna vertebral. 

Cómo funciona: el médico administrará ondas de radio a través de una aguja insertada junto al nervio. La lesión del nervio interrumpe las señales de dolor. «El nervio suele volver a regenerarse en tres o 12 meses», afirma el doctor Desai. «Si tiene artritis, es probable que vuelva a sentir dolor». 

Dolor para el que funciona bien: según el doctor Desai, esta terapia es sumamente útil para los pacientes con OA en las articulaciones facetarias. «Esta terapia puede ser utilizada para múltiples tipos de artritis. Suele ser utilizada para el dolor de espalda», añade. 

Riesgos: en raras ocasiones, se puede experimentar entumecimiento, infección, sangrado o un incremento temporal del dolor. O el procedimiento puede no funcionar en absoluto. 

11. Estimulación de los nervios periféricos

De qué se trata: el médico implanta un electrodo de prueba justo debajo de la piel a lo largo de un nervio periférico dolorido (cualquier nervio situado fuera del cerebro y la médula espinal) que recibe señales eléctricas de un pequeño generador operado con baterías. Si el dolor se alivia luego de una semana de prueba, se colocan de forma permanente el electrodo junto a un pequeño generador. 

Cómo funciona: la terapia funciona de forma muy parecida a la TENS. «Una corriente eléctrica estimula las grandes fibras rápidas [cuyos mensajes] llegan a la médula espinal antes que [los] de las fibras delgadas que transportan el dolor»", afirma el doctor Desai. 

Dolor para el que funciona bien: «si bien es más comúnmente utilizada para las lesiones nerviosas, también se emplea para el dolor lumbar, [como por ejemplo el] causado por la artrosis», afirma el doctor Desai. «El alivio puede durar de forma permanente». 

Riesgos: es posible que se produzca una infección y una mayor lesión del nervio, afirma el doctor Desai, «pero es un procedimiento de bajo riesgo». 

12. Bomba para el dolor

De qué se trata: tras un breve ensayo, el médico implanta una pequeña bomba programada para administrar cantidades variables de medicamentos para el dolor, tales como morfina o baclofeno (un relajante muscular), a través de un catéter introducido en un espacio situado alrededor de la médula espinal. 

Cómo funciona: «la bomba suministra la medicación narcótica directamente en la zona dolorida, de modo que el paciente tiene menos efectos colaterales en todo el sistema que los que tendría con los narcóticos por vía oral», afirma el doctor Desai. 

Dolor para el que funciona bien: «se utiliza cada vez más para el dolor lumbar que podría estar causado por la artrosis o la artritis espinal», afirma el Dr. Desai. 

Riesgos: como sucede con cualquier cirugía, existen riesgos de infección y sangrado. Y es posible que el catéter se bloquee, aunque es raro. La batería también debe ser sustituida cada cinco o siete años. En algunos casos en los que las bombas han suministrado medicamentos a una articulación, como por ejemplo la del hombro, los pacientes han desarrollado condrolisis, una rara condición en la que el cartílago muere.