Fortalezca su matrimonio cuando tenga artritis

Cuando tenga que hablar con su marido, siéntese y tómese el tiempo necesario para explicarle su punto de vista. Piense también en las cosas desde su perspectiva. No dé por sentado que su pareja tiene más información al respecto. "Gran parte de los males de nuestras relaciones se deben a que esperamos que nuestras parejas sepan lo que sentimos sin tener que decirlo", dice Jeffrey Bernstein, PhD, un psicólogo familiar que ejerce en Exton, PA.   

La honestidad es una calle con dos direcciones. Las parejas deben hablar sobre sus sentimientos. Es posible que minimice lo mal que se siente porque le preocupa que el otro piense que se queja demasiado. Quizá su cónyuge le dé la espalda porque está realmente resentido por las dificultades económicas o las tareas domésticas.  

Cuando hable, mantenga el contacto visual y utilice un lenguaje productivo. Evite frases negativas como "siempre haces esto" o "nunca se te ocurre hacer aquello". No retome temas antiguos. En su lugar, mire hacia adelante y analice cómo puede hacer las cosas de forma diferente en el futuro.

¿Le cuesta abordar conversaciones difíciles con su mujer? Intente utilizar una escala del uno al 10 para prepararse para las conversaciones difíciles. Por ejemplo, antes de decir que no tiene ganas de ir a la fiesta esta noche, avise diciendo: "Tengo que contarte un problema que tiene un rango de cinco o seis".  

Cuando las parejas trabajan juntas se sienten más conectadas. Deje que su cónyuge lo ayude a sobrellevar su enfermedad. Involúcrelo en las visitas al médico o en las citas de fisioterapia. "Trabajar con su pareja para controlar su enfermedad abordará automáticamente cuestiones como la comunicación, la empatía, la paciencia, aprender a pedir ayuda o aprender a contarle a alguien lo que le pasa", dice LeslieBeth Wish, EdD, trabajadora social clínica licenciada especializada en problemas de la mujer.  

Asegúrese de que su cónyuge entiende el impacto físico y emocional de su enfermedad. Llévelo a una reunión de un grupo de apoyo o, mejor aún, encuentre uno al que puedan unirse juntos. Todos necesitan un espacio seguro para expresar sus sentimientos.  

Usted sabe que su intención es buena. Pero cuando su cónyuge es excesivamente solícito puede hacerla sentir denigrada o impotente. "Puede que esté intentando recuperarse de una operación de rodilla, y que su marido simplemente esté preocupado porque se vaya a caer", dice Kathy Robinson, PhD, profesora asociada de enfermería en la Universidad de North Florida. Por otro lado, aunque usted tenga dolor físico, recuerde que su pareja está sufriendo de otra manera. "Puede sentirse increíblemente impotente, así que [hágale saber que] su sola presencia es útil", dice Bernstein.  

No puede hacerlo todo. Cuando un cónyuge con artritis necesita muchos cuidados, puede resultar abrumador para la pareja sana. Programe un tiempo libre. Recurra a proveedores de servicios o pida a un familiar que lo ayude durante unas horas a la semana.

Ponga el sexo en el primer lugar de su lista de tareas. Las lociones terapéuticas que reducen el dolor articular pueden ayudar a una persona con artritis a relajarse en una cita íntima.  

"Establezca fechas para el sexo de modo que la persona con artritis pueda prepararse tomando la medicación para el dolor, evitando hacer demasiadas tareas durante el día y creando una sensación de deseo", dice Afton Hassett, PsyD, psicóloga clínica e investigadora científica asociada de la Universidad de Michigan.

Nunca estará completamente vestido sin una sonrisa. Cada tanto, haga algo divertido con su pareja que los haga reír a ambos. Planifique una excursión al mercado de pulgas, vaya a un partido de fútbol o comparta un pasatiempo que ambos disfruten. Un poco de afecto también puede ayudar mucho. Toque o bese a su pareja todos los días. Escríbale una nota bonita o un correo electrónico para decirle que está en sus pensamientos.