EN

Gestión del riesgo de infección en niños con artritis

Obtenga información sobre los factores de riesgo de infección y enfermedad grave, y formas de mantener saludable a su hijo.

Fecha de actualización: 29 de abril de 2022

Además de los riesgos de la enfermedad en sí, una de las mayores preocupaciones de los padres cuyos hijos tienen artritis juvenil (AJ) es el riesgo de infección. Conocer los factores que pueden aumentar el riesgo de infección puede ayudarlo a proteger a su hijo.  

Factores de riesgo de infección 

Cuando la AJ está activa y no está bien controlada, la enfermedad en sí puede aumentar el riesgo de infección, explica Melissa Mannion, MD, profesora asistente en la División de Reumatología Pediátrica de la Universidad de Alabama en Birmingham. "La actividad de la enfermedad también puede aumentar la necesidad de más medicamentos, lo que también puede incrementar el riesgo de infección", agrega.

Esto se debe a que algunos medicamentos para tratar la AJ también pueden obstaculizar la capacidad del sistema inmunitario para combatir las bacterias, los virus y los hongos. Afortunadamente, el riesgo sigue siendo bajo para la mayoría de los tratamientos, señala Karen Onel, MD, jefa de Reumatología Pediátrica del Hospital for Special Surgery en New York City. Los estudios muestran que los niños que toman metotrexato o drogas biológicas, como los inhibidores del FNT (los tratamientos más comunes para la AJ), tienen un riesgo de infección mucho menor que los adultos que toman estos mismos medicamentos.

"Además, globalmente el riesgo de infección en niños con AJ que toman estos medicamentos no es mucho mayor que en los que no lo toman", indica la Dra. Onel. "Esto debería ser tranquilizador para los padres".

Al mismo tiempo, los médicos señalan que existen factores de riesgo relacionados con los medicamentos que los padres deben conocer. Por ejemplo, los corticoesteroides sistémicos pueden aumentar el riesgo de infección cuando se toman a largo plazo y en dosis altas, explica la Dra. Onel. Esto no se aplica a los corticoesteroides que se administran por vía tópica o que se inyectan directamente en la articulación.

En un estudio de 2016 que utilizó datos de Medicaid, la Dra. Mannion y sus colegas descubrieron que los niños con artritis idiopática juvenil (AIJ) que tomaban altas dosis de corticoesteroides tenían más probabilidades de ser hospitalizados por una infección.

Por esa razón, los médicos siempre administran las dosis más bajas posibles durante el menor tiempo posible, indica la Dra. Onel.

Los médicos deben evaluar a los niños para detectar tuberculosis antes de comenzar con los inhibidores del FNT (es decir, adalimumab, etanercept o golimumab). Los niños que toman inhibidores del FNT también tienen un mayor riesgo de infecciones micóticas, aunque el riesgo es bajo, señala la Dra. Onel. "Sin embargo, las infecciones micóticas en los niños que toman inhibidores del factor de necrosis tumoral pueden verse muy diferentes a las de los niños que no toman esos medicamentos y pueden pasar desapercibidas".

La tos es un síntoma clave de las infecciones micóticas. Entonces, si un niño que toma un inhibidor del FNT desarrolla una tos fuerte que no desaparece, los médicos deben considerar la posibilidad de una infección micótica, así como otras infecciones infantiles comunes, indica la Dra. Onel.   

La tos también es un síntoma del coronavirus, junto con la fiebre y la falta de aire, así que informe al médico de su hijo de inmediato si nota alguno de estos síntomas.

Niños y COVID

Cuando los niños con artritis contraen infecciones, como la varicela o la gripe, la enfermedad puede ser más grave que en los niños sin artritis. Pero una investigación reciente sugiere que los niños con AJ tienen un riesgo relativamente bajo de infección grave por coronavirus. Los datos de tres bases de datos de reumatología internacionales encontraron que solo el 7% de los niños con artritis idiopática juvenil (AIJ) fueron hospitalizados con COVID-19 y la mayoría no estaba gravemente enfermo. El tratamiento con drogas biológicas, incluidos los inhibidores del factor de necrosis tumoral, tampoco pareció poner a los niños en un riesgo más alto de contraer una infección grave por COVID-19. Los investigadores que estudiaron los datos señalan que estos resultados deberían tranquilizar a los padres.

De eso se hace eco Michael George, MD, reumatólogo y epidemiólogo de la Universidad de Pennsylvania. "Las posibilidades de que los niños tengan una enfermedad grave o problemas pulmonares graves [debido al coronavirus] parecen ser muy bajas", expresa. (Escuche al Dr. George en uno de los primeros episodios del podcast Live Yes! With Arthritis hablar sobre el virus SARS-CoV2 que causa la enfermedad del coronavirus en ese momento).

MIS-C

Aunque la mayoría de los niños con artritis no parecen tener un riesgo especial de contraer COVID-19, cualquier niño, incluso aquellos con casos leves, pueden desarrollar una complicación rara y potencialmente fatal llamada síndrome inflamatorio multisistémico en niños (MIS-C). Puede causar una inflamación grave en los órganos y tejidos de todo el cuerpo, incluidos el corazón, los riñones, los vasos sanguíneos, el sistema digestivo, la piel y los ojos. Los síntomas más comunes parecen involucrar el tracto digestivo y el corazón, pero también pueden incluir:

  • Fiebre que dura 24 horas o más
  • Vómitos
  • Erupción cutánea
  • Fatiga
  • Respiración y pulso acelerados
  • Enrojecimiento ocular
  • Dolor de cabeza, mareos o aturdimiento

Si su hijo desarrolla dolor de estómago intenso, dificultad para respirar o, según el tono de la piel, piel, labios o uñas pálidos o azulados, solicite asistencia médica de emergencia de inmediato.

Nadie está seguro de qué causa el MIS-C o por qué algunos niños lo contraen y otros no, pero parece ser una respuesta inmunitaria extrema al COVID-19. Algunos de los primeros casos fueron diagnosticados como enfermedad de Kawasaki, un tipo raro de vasculitis con muchos síntomas similares al MIS-C. Investigaciones posteriores demostraron que, si bien los dos tienen algunas características en común, son enfermedades distintas.

La mayoría de los niños se recuperan del MIS-C con tratamiento, generalmente una combinación de inmunoglobulina intravenosa (IV) y corticoesteroides, pero algunos que se enferman muy rápidamente no sobreviven.

Reduzca el riesgo de su hijo 

Los padres pueden ayudar a proteger a sus hijos asegurándose de que reciban las vacunas apropiadas para su edad, incluida una vacuna anual contra la gripe, con una excepción importante: los niños que toman corticoesteroides deben evitar las vacunas elaboradas con virus vivos (incluida la vacuna contra la varicela, la vacuna triple viral o la vacuna contra la gripe nasal) porque aumentan el riesgo de que su hijo se enferme. Otras inmunizaciones, como la vacuna contra la hepatitis A, la hepatitis B, la meningitis y el virus del papiloma humano, también son seguras. Además, los padres deben asegurarse de que todos los miembros del hogar, incluidos ellos, se vacunen para reducir el riesgo de exposición de sus hijos con artritis. 

Desinfectar regularmente las superficies del hogar que se tocan con frecuencia, como las manijas de las puertas y los grifos, también es otra forma de ayudar. La Dra. Onel recomienda solicitar que también se limpien otras superficies compartidas (la barra en la clase de ballet de su hija, las colchonetas de lucha en el gimnasio de la escuela, entre otras).  

"También es importante que los padres hablen sobre los resfriados o infecciones frecuentes con el reumatólogo de su hijo para que puedan decidir si es necesario cambiar la medicación o si sería útil una evaluación inmunológica adicional", señala la Dra. Mannion.

Nunca suspenda los medicamentos sin antes consultar al médico de su hijo. Una de las peores cosas que un padre puede hacer cuando un niño se enferma es no darle el medicamento, expresa la Dra. Onel. Hacerlo podría reactivar la enfermedad y tener consecuencias más duraderas que la mayoría de las infecciones, agrega.

Si su hijo presenta síntomas del coronavirus, informe a su médico de inmediato. En algunas circunstancias especiales, es posible que sea necesario aumentar o disminuir algunos medicamentos, señala Richard Vehe, MD, director de la División de Reumatología Pediátrica de la Facultad de Medicina de la Universidad de Minnesota en Minneapolis. Los médicos también pueden sugerir suspender ciertos medicamentos por un período breve para asegurarse de que no contribuyan a una enfermedad más grave, señala el Dr. George.

Hable con su hijo 

Practicar una buena higiene y lavarse las manos con frecuencia son los hábitos más importantes que los niños pueden practicar para prevenir infecciones. La Dra. Onel recomienda darles a los niños un desinfectante de manos de bolsillo para cuando no tengan acceso al agua y al jabón. También es importante advertir a su hijo sobre los riesgos de compartir bebidas, alimentos y bálsamos labiales, explica la Dra. Mannion.

Es importante estar informado, ya que los niños con artritis no pueden vivir dentro una burbuja. "Afortunadamente, a la mayoría de los niños con artritis les va muy bien siempre que los padres y los médicos los vigilen y protejan, y mantengan a todas las personas que los rodean con buena salud", expresa la Dra. Onel.

Contáctese con nosotros

Obtenga las últimas noticias y actualizaciones sobre nuestros recursos y eventos relacionados con la artritis juvenil. Regístrese proporcionando su información a continuación.