Ir directamente al contenido principal

EN

Artritis juvenil e imagen corporal

Los sentimientos de los niños y jóvenes sobre su cuerpo tienden a fluctuar en consonancia con los síntomas de la enfermedad. Aquí le brindamos algunos consejos sobre cómo puede ayudar.

Por Emily Delzell

En algún momento, casi todos los niños luchan con su imagen corporal. Lidian con pensamientos y sentimientos relacionados con la forma en la que ellos y los demás ven su cuerpo.

«La artritis juvenil (AJ) a menudo implica desafíos adicionales», afirma Lauren Cox, PhD, psicóloga pediátrica en el Hospital del Rito Escocés de Texas para Niños, en Dallas. Esta señala que las articulaciones hinchadas y adoloridas pueden modificar la forma en la que los niños pueden utilizar su cuerpo. Y la artritis psoriásica puede marcar la piel con escamas rojas y plateadas. Los efectos colaterales de los medicamentos para la artritis pueden incluir fatiga, pérdida de cabello y aumento de peso. Todo esto significa que los niños con AJ pueden verse y funcionar diferente que sus compañeros, y ellos lo saben.

«Los niños se vuelven más conscientes de sí mismos en relación con otras personas a medida que crecen y se desarrollan», afirma Cox. «La mayoría de los niños en edad escolar y los adolescentes se sienten realmente motivados a encajar, y no desean ser vistos como diferentes».

Cuando los problemas de imagen corporal se imponen

Las luchas con la AJ y la imagen corporal tienen lugar en una sociedad en la que se valora a las personas por una apariencia idealizada y por sus habilidades físicas. Tanto a los niños más pequeños como a los adolescentes les puede costar aceptarse. La sensibilidad de los adolescentes con respecto al aspecto físico es sumamente común, según afirma Cox. Pero en lo que respecta a los niños con AJ, señala, las preocupaciones parecen estar más ligadas a cómo la artritis afecta al niño.

«Para un adolescente cuya enfermedad o tratamiento hayan impactado en pequeña medida en su vida, el efecto sobre su imagen corporal puede llegar a ser mínimo», afirma. «Por el contrario, a un niño de 8 años con una discapacidad significativa le puede costar mucho adaptarse a las formas en las que la artritis ha impactado en su cuerpo. Esto es algo muy específico de cada niño».

Cuando los niños con AJ absorben sentimientos y mensajes negativos, pueden sentirse tristes, ansiosos y solos, según afirma Cox.

«Si esto no se controla, potencialmente podría convertirse en una disfunción de nivel más clínico, como por ejemplo, depresión o trastornos de ansiedad», afirma. Entre las señales de advertencia se incluyen:

  • Dejar de llevar a cabo algunas actividades.
  • Vestirse de forma diferente para ocultar los signos de la enfermedad.
  • Dormir mal.
  • Volverse irritable.
  • Desmotivarse.

Ayude a desarrollar aceptación

Colabore estrechamente con los médicos para que su hijo tenga la menor cantidad posible de síntomas y efectos colaterales provocados por la medicación. «El hecho de lograr un control adecuado de la enfermedad, con mínimos efectos colaterales, reduce los efectos negativos», afirma Cox.

En primer lugar, hay que ser proactivo en lo que respecta al control de la enfermedad. Plantee sus preocupaciones en las visitas médicas, en lugar de esperar a que lo haga el médico. Cox brinda estas otras sugerencias:

  • Enséñele a su hijo que todo el mundo tiene diferencias y problemas con los que lidiar; solo que algunos son más evidentes que otros.
  • Ayude a su hijo a cultivar intereses factibles cuando experimente brotes relacionados con la enfermedad.
  • Elogie a su hijo por atributos que no sean físicos, tales como persistencia, honestidad y amabilidad.
  • Conecte al niño con compañeros que comprendan por lo que está pasando. Los campamentos para niños con AJ y las conferencias nacionales organizadas por la Arthritis Foundation son excelentes opciones para que las familias se conecten con personas que «los comprenden».  
  • Supervise el grupo de compañeros de su hijo y las redes sociales; efectúe modificaciones si se siente incómodo con alguna interacción.

Si la preocupación por la imagen corporal de su hijo continúa siendo un problema, puede ser el momento de buscar ayuda. Su médico podrá remitirlo a un consejero, a un trabajador social, a un terapeuta o a un psicólogo.

Contáctese con nosotros

Obtenga las últimas noticias y actualizaciones sobre nuestros recursos y eventos relacionados con la artritis juvenil. Regístrese proporcionando su información a continuación.