Hágase tiempo para cuidarse a sí mismo

Por Emily Delzell

Cuando se vive con artritis, especialmente ante la agitación mundial, cuidarse es primordial para mantener la salud y el bienestar. «Acudimos al médico de vez en cuando, pero lo que hacemos día a día es lo que determina nuestra salud y nuestra calidad de vida», afirma la psicóloga especializada en el dolor y científica Beth Darnall, PhD, profesora clínica de la Universidad de Stanford de California. «Las decisiones que tomamos a diario sobre movernos más, comer bien, controlar el estrés y dormir adecuadamente pueden intensificar nuestro dolor o disminuirlo; también pueden favorecer nuestro funcionamiento y calidad de vida o dificultarlos».

Según Fuschia Sirois, PhD, psicóloga de la University of Sheffield de Reino Unido, «adoptar una actitud de amabilidad, gentileza y aceptación de sí mismo ante los retos y los fracasos puede mejorar la capacidad de cuidarse a sí mismo». El estudio de Sirois sobre la autocompasión ante las enfermedades crónicas, que se publicó recientemente en la revista Mindfulness, explica las razones.

«Las personas más autocompasivas estaban menos estresadas y se cuidaban más que las personas que solían juzgarse y culparse por los fracasos experimentados, lo que aumenta la ansiedad y la angustia», afirma.

Trátese a sí mismo(a) con la misma amabilidad con la que trata a sus amigos que están pasando dificultades.

Cuidar de sí mismo(a) puede implicar comprometerse a realizar alguna actividad física con regularidad, seguir una dieta basada en plantas o dormir lo suficiente, pero también abarca el cuidado mental y emocional: aprender a romper con los patrones de pensamiento negativos y evitar el aislamiento social. Convertir las rutinas de cuidado personal en un hábito hará que sea más fácil seguirlas en los momentos difíciles.

Puede ser difícil complementar la lista de tareas con medidas de cuidado personal, pero dejar de hacerlo «es como perder una batalla en el control del dolor», señala Darnall. «Cuando se padece dolor crónico, es preciso que demos prioridad al cuidado personal para así estar más disponibles para los demás».

«Establecer un horario lo ayudará a cumplirlo», dice Darnall. Hacer ejercicio con regularidad, comer y dormir lo ayudará a afrontar la crisis con fortaleza. «Cuando incorporamos el cuidado personal a nuestra rutina, se convierte en algo natural. También permite tener una reserva para no estar totalmente agotados durante los periodos de estrés».

«Si lo mejor para usted es el autocontrol, utilice una aplicación de gestión de tareas o comportamiento», dice la psicóloga clínica Tamara J. Somers, PhD, profesora asociada del Duke University Medical Center de Durham en North Carolina. «Si la vida social lo ayuda a cumplir con las cosas, establezca un horario regular para salir a caminar con su pareja», comenta. Y si no puede reunirse con un amigo, también puede hacerlo por teléfono. «[Interactuar] con otros aleja el dolor de la mente y reduce el impulso de pensar en lo negativo».

Pídale a su familia que lo ayude a priorizar el cuidado personal, señala Darnall. Los grupos de apoyo son excelentes recursos para obtener información sobre el cuidado personal. Asimismo, algunos centros médicos ofrecen programas que enseñan técnicas para hacer frente al dolor. «También puede acudir a un terapeuta que ofrezca la terapia conductual cognitiva, que le enseñará a identificar y superar las barreras que impiden un óptimo cuidado personal», afirma Somers.