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Cómo jugar al golf si tiene artritis

Obtenga consejos inteligentes para ajustar sus golpes, precalentar y seguir jugando al golf a pesar de la artritis.

No es necesario que cuelgue los palos de golf una vez que le hayan diagnosticado artritis. Después de todo, los beneficios físicos del golf, como lograr mayor fuerza, equilibrio y coordinación, y una mejor amplitud de movimiento, hacen que valga la pena seguir jugando. Con solo unos pocos ajustes, puede mejorar su swing de golf.

Entrada en calor
Es indispensable que todos los golfistas tengan un buen programa de preparación física, pero especialmente si necesitan protección adicional en las articulaciones. Una preparación adecuada puede ayudar a mantener la mayor amplitud de movimiento posible de las articulaciones y a reducir las posibilidades de lesiones. Y entrar en calor antes de hacer ejercicio, incluso antes de las horas de salida, es imprescindible para proteger y preparar adecuadamente los músculos y las articulaciones.

Para entrar en calor, comience con una caminata de unos minutos. Tómese entre 5 y 10 minutos para estirar, sobre todo los isquiotibiales (la parte posterior de los muslos) y la espalda.

Ejercicios para la amplitud de movimiento 
También se recomiendan ejercicios simples de amplitud de movimiento antes de comenzar para prevenir lesiones y mejorar el rendimiento general del juego. A continuación, encontrará algunos ejercicios que lo ayudarán a comenzar.

 

Amplitud de movimiento

Levante los brazos hacia los costados a la altura de los hombros. Mueva los brazos con un movimiento circular, aumentando gradualmente el tamaño de los círculos. Invierta la dirección después de 30 segundos.

Con los brazos a los lados y los codos doblados a 90 grados, gire el torso y la cabeza hacia la izquierda como si estuviera mirando por encima del hombro y manténgalo así durante cinco segundos. Asegúrese de girar desde la cintura. Vuelva a la posición inicial.

Coloque los pies separados al ancho de los hombros. Con las dos manos, sostenga un palo en los extremos opuestos y levántelo por encima de la cabeza. Incline el torso hacia un lado para sentir el estiramiento en el lado opuesto. Repita 10 veces de cada lado inclinando el torso un poco más cada vez.

Realice entre 10 y 15 swings lentos de tres cuartos en el campo de práctica antes de comenzar a jugar. Comience dando golpes con palos con un loft más alto, como pitching wedge, y comience con un swing de entre 50 y 75 por ciento.
 

Consejos para jugar al golf

Juegue desde los marcadores de 150 yardas si comienza a cansarse. Considere usar técnicas de ahorro de energía mientras está jugando. Tome solo los palos que usa con más frecuencia. Tire de su bolsa de golf en lugar de cargarla, o alquile un carrito motorizado en lugar de caminar.

Ejerza una tensión constante en el palo. Procure no dejar que sus brazos y tronco se vuelvan demasiado rígidos.

Si tiene dolor de espalda, es posible que el swing clásico le resulte más cómodo que el swing moderno o la posición de C invertida.
 

Termine antes de tiempo, en la posición de las tres en punto, en lugar de la posición de la una, para evitar lesiones en la espalda, el hombro y el codo. Siempre roce el césped para golpear la pelota con fuerza y ​​llevar su impulso al objetivo.

Concéntrese en barrer la pelota. Transferir peso de una pierna a la otra es más fácil si permite que los talones se levanten y, además, el tiro resulta más efectivo. Deje que el impulso natural del swing continúe hasta la posición de seguimiento.

Cuando se detenga, la columna debe estar lo más vertical posible para minimizar la carga sobre la lumbar.

Independientemente de que sea un golfista experimentado o principiante, consulte a su médico o fisioterapeuta antes de comenzar a jugar. Un terapeuta ocupacional también puede asesorarlo sobre cualquier ayuda especial o herramienta de adaptación.

Dean Claggett, director de golf en Two Eagles Golf and Academy, en West Kelowna, Columbia Británica, y Shandia Cordingley, fisioterapeuta en Dale Charles Physiotherapy, en Penticton, British Columbia, trabajaron con la Arthritis Society en Canadá para desarrollar estos consejos de swing de golf específicamente para golfistas con artritis.
 

Prepárese.

Use palos livianos con mangos de grafito y cabezas con distribución perimetral del peso para una mejor amortiguación de impactos. Lleve solo los palos que usará durante el juego para aligerar la carga de la bolsa de golf.

Consiga una bolsa de golf con un carro con ruedas para que pueda empujarla en lugar de tirarla o cargarla.

Use una pelota de golf de menor compresión (por ejemplo, una de 90 en lugar de una de 100) para que la pelota "ceda" más cuando la golpee.

Use tees largos cada vez que golpee la pelota, incluso en el campo de práctica. Los tees largos le permiten pararse más recto y ayudan a proteger las articulaciones de la mano y de la muñeca al reducir la posibilidad de golpear el suelo con el palo y sacudir las articulaciones. Los tees se pueden utilizar incluso en la calle.

Use zapatos para caminar de buena calidad o zapatos de golf sin tacos para mayor comodidad de los pies y para reducir la posibilidad de tropezarse. La amortiguación adicional o las plantillas ortopédicas en los zapatos también pueden ayudar a disminuir los dolores y molestias mientras camina por la pista.

El uso de guantes en ambas manos proporciona un agarre adicional sin tener que aumentar la presión. Los guantes de golf Bionic ($25, www.bionicgloves.com) tienen almohadillas especiales para aliviar el dolor y la fatiga de las manos mientras mejoran la fuerza de agarre.
 

Aumente el tamaño del grip de sus palos con una venda elástica o un grip personalizado, que lo ayudará a sostenerlos con mayor facilidad y a reducir la tensión y el dolor en las articulaciones de los dedos. Si tiene artritis en las manos, intente usar muñequeras y guantes en ambas manos para estabilizar las articulaciones.



 

Independientemente de que sea un golfista experimentado o principiante, consulte a su médico o fisioterapeuta antes de comenzar a jugar. Un terapeuta ocupacional también puede asesorarlo sobre cualquier ayuda especial o herramienta de adaptación.

La adaptación es la clave para jugar al golf con artritis, y un buen equipo de golf puede ser de gran ayuda. Los grips, los zapatos, las pelotas y los palos, entre otras cosas, se pueden adaptar a sus necesidades y habilidades específicas. Además de los consejos sobre equipos de golf que se enumeran a continuación, su tienda profesional local o tienda especializada en golf también puede ayudarlo a estar informado sobre los últimos productos para que jugar al golf sea más fácil para sus articulaciones.

Manténgase informado. Viva en el sí.

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