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Hábitos de estilo de vida saludable para la artritis psoriásica

Tener un estilo de vida saludable es clave para controlar la artritis psoriásica. 

Comer bien, hacer ejercicio y mantener un estilo de vida saludable son algunas de las mejores formas de controlar la artritis psoriásica y sus síntomas. Tener sobrepeso u obesidad contribuye en gran medida a la enfermedad y al dolor y los problemas de la piel que vienen con esta. Los estudios demuestran que hacer dieta y ejercicio a la vez es más eficaz para perder peso que solo hacer dieta. Y mantenerse activo le ayudará a aliviar el dolor articular y la rigidez y será beneficioso para el corazón, la salud mental y mucho más.

"Una buena nutrición y hacer ejercicio es importante para las personas que tienen artritis psoriásica, ya que las ayuda a mantener un peso saludable y a conservar la masa muscular y el estado físico, en especial, a medida que envejecen", dice la médica Ana-Maria Orbai, reumatóloga de Johns Hopkins Arthritis Center (Centro de Artritis Johns Hopkins) en Baltimore. "Una dieta sana y equilibrada y el programa de ejercicios pueden resolver el perfil de riesgo desfavorable de las personas con artritis psoriásica para la obesidad, diabetes y enfermedades cardiovasculares".

Mantenerse activo
Se dice que el movimiento es medicina. Hacer ejercicio no solo es bueno para las articulaciones, sino que también puede ayudar a aliviar el estrés, mejorar el sueño y proteger la salud del corazón.  Así que, encuentre una rutina de bajo impacto que disfrute y lo mantenga en movimiento.  Estos son algunos consejos para comenzar.

Comience de a poco. Antes de comenzar a hacer ejercicio, consulte con su médico y tenga la inflamación bajo control, dice Maura Daly Iversen, profesora y presidenta del Departamento de Fisioterapia, Movimiento y Ciencias de la Rehabilitación de la Universidad Northeastern en Boston. "Comience de a poco y hágalo más intenso gradualmente". Si bien cierto dolor muscular es normal, esté atento al dolor articular. "Nunca presione el dolor (articular), que podría ser una señal de que le está haciendo daño a las articulaciones", agrega.

Mezcle su rutina. Encuentre actividades que disfrute, de manera que las haga, y mézclelas para obtener todos los beneficios. El ejercicio aeróbico o cardiovascular brinda los beneficios cardiovasculares más directos, y las actividades de elongación y fuerza le proporcionarán músculos más fuertes y flexibles junto con un mejor equilibrio. Una buena rutina semanal podría incluir tres sesiones de actividad aeróbica moderada más dos clases, como yoga o Pilates, que combinan movimientos de elongación y fuerza. "La clave es alternar los tipos de ejercicio para reducir el aburrimiento y el desgaste", comenta Iversen.

Manténgalo de bajo impacto. Ya sean ejercicios cardiovasculares, de elongación o fuerza, elija actividades que no agraven las articulaciones. "Caminar, andar en bicicleta (o) hacer yoga, y nadar o hacer ejercicios aeróbicos (en el agua) en una piscina a temperatura ambiente o tibia, no fría, son buenas elecciones", dice Iversen. "Piense en actividades de bajo impacto que impliquen movimientos controlados". Las máquinas elípticas, las caminadoras y otros equipos de ejercicio que producen un impacto mínimo en las articulaciones también son buenas opciones, agrega. Para hasta el 50 por ciento de las personas cuya artritis psoriásica afecta la columna vertebral, mantener el ejercicio de bajo impacto es de especial importancia, dice la doctora Orbai. La gente con AP, en general, debe evitar los campamentos de entrenamiento, comenta Iversen. "Esos ejercicios de alta intensidad y de impacto pueden dañar las articulaciones".

Consulte a un profesional. Se recomienda a las personas cuya AP afecta la columna vertebral que trabajen con un fisioterapeuta (FT) para que hagan ejercicio de manera segura, comenta la doctora Orbai. "Consultar a un FT o un entrenador es una buena idea para cualquiera que recién empiece a hacer ejercicio o para quienes hayan tenido alguna lesión anterior del aparato locomotor", agrega. El entrenamiento con pesas puede ser seguro y mejora rápidamente la fuerza muscular, comenta. "Sin embargo, si recién empieza a hacer ejercicios de resistencia, trabaje con un entrenador que sepa sobre artritis inflamatoria".

Alimentarse bien
Seguramente conozca el dicho "somos lo que comemos".  Cuando se trata del efecto de la dieta sobre la artritis, lo que coma puede afectar cómo se sienta. Ninguna dieta puede curar la artritis psoriásica (AP), pero los alimentos adecuados pueden mejorar enormemente su salud. Estos alimentos pueden reducir la inflamación y ayudar a evitar problemas que a menudo acompañan a la AP, que incluyen obesidad y un riesgo aumentado de desarrollar enfermedades cardiovasculares (CVD). Estos son cinco alimentos que deberían estar en su plato.

Pescados grasos. Los ácidos grasos omega-3 del salmón, la trucha, la caballa y la sardina son conocidos por aliviar la inflamación, el villano detrás de muchos síntomas de la AP. Las dietas ricas en pescados grasos también demostraron
ayudar a disminuir el riesgo de CVD.

Nueces. Las nueces, semillas de calabaza, semillas de lino y el aceite de semillas de lino contienen un tipo de omega-3 llamado ácido alfa-linolénico (ALA) que también ayuda a combatir las CVD. En los estudios, se demostró que las nueces disminuyen el colesterol y reducen la inflamación. Un estudio demostró que comer nueces incluso parece ayudar a reducir el riesgo de aumento de peso, pero eso no significa que ayudará a perderlo; las nueces son altas en grasas.

Aceite de oliva. En un estudio español, un grupo de personas que siguió una dieta mediterránea complementada con aceite de oliva extravirgen o nueces tuvo un 30 por ciento menos de ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares que las personas que siguieron una dieta baja en grasas. El aceite de oliva contiene compuestos fenólicos, incluido el oleocantal, que combaten la inflamación. Pero no se pase de la raya: contiene alrededor de 120 calorías por cucharada.

Proteínas magras. El pollo sin piel y el cerdo son ricos en proteínas y bajos en grasas. "Los problemas que vemos con la composición corporal de nuestros pacientes con artritis inflamatoria son la pérdida de músculo y el aumento de grasa", dice la médica Rebecca Manno, profesora adjunta de Medicina en la División de Reumatología de la Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins. "La proteína tiene que ser una parte importante de la reconstrucción muscular y la mayoría de la gente no consume suficiente". ¿No come carne? Agregue proteína de suero a la avena o úsela en un batido proteico, agrega.

Vegetales de muchos colores. Las dietas ricas en vegetales son famosas por ser saludables para el corazón y, en un estudio reciente, las mujeres que comieron más vegetales crucíferos, como brócoli, coles de Bruselas, col rizada y coliflor, tuvieron niveles más bajos de inflamación que aquellas que comieron menos de esos vegetales. La doctora Manno recomienda comer vegetales de muchos colores en lugar de carbohidratos con almidón. Y tenga en cuenta que lo que come puede no ser tan importante como la cantidad que come, en especial, si tiene sobrepeso.

El exceso de grasa corporal produce inflamación. "Creo que el aspecto más importante para controlar la artritis en una dieta es el control de las porciones, ya que la obesidad es un factor principal en la mayoría de las formas de artritis inflamatoria", dice el médico Eric
Matteson, profesor de Medicina y reumatólogo de Mayo Clinic.

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