De qué modo la grasa afecta a la gota 

La gota se produce cuando se acumula un exceso de ácido úrico en el organismo, lo que hace que se alojen cristales afilados en las articulaciones. El ácido úrico se forma de forma natural cuando se descomponen las purinas, un compuesto que se encuentra en la mayoría de los alimentos, pero especialmente en la carne roja, el marisco y la cerveza. Por lo general, el ácido úrico se elimina a través de los riñones. Sin embargo, cuanto más peso tiene, menos eficientes son sus riñones. Esto lo pone en mayor riesgo de gota, un riesgo diez veces mayor para las personas con más peso, según el experto en gota Hyon Choi, MD, profesor de Medicina y director de Epidemiología Clínica en Reumatología en el Massachusetts General Hospital en Boston. También es más probable que desarrolle gota una década antes que las personas de peso saludable. 
 
El lugar en el que se depositan el peso también importa. Las personas que tienen grasa visceral (grasa abdominal), aunque técnicamente no tengan sobrepeso, son más propensas a desarrollar gota. Esto puede deberse a que la grasa abdominal produce más sustancias químicas inflamatorias que pueden desencadenar la enfermedad que la grasa subcutánea (como la de los muslos). 

Las personas que padecen gota suelen tener otros problemas de salud graves, como diabetes, presión arterial alta, enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares. Los estudios sugieren que la inflamación es el hilo conductor, no la gota en sí. La obesidad también es un factor de riesgo para varias de estas comorbilidades. La gota no es solo un "dolor en el dedo gordo del pie, también afecta a otros órganos, incluido el corazón", menciona el doctor Jasvinder Singh, investigador de la gota y profesor de Medicina y Epidemiología de la Universidad de Alabama, en Birmingham.

La dieta es muy importante en la gota; se sabe que ciertos alimentos desencadenan los ataques. Sin embargo, una dieta que simplemente elimine alimentos ricos en purinapuede no ser suficiente. Un mejor enfoque, según los médicos, es adoptar un modo de alimentación saludable integral como la dieta DASH o Mediterránea. Ambos limitan la carne roja, el azúcar y los alimentos procesados, y se centran en frutas y verduras frescas, algunos cereales integrales y grasas saludables como el aceite de oliva. El ejercicio y la pérdida de peso también reducen los niveles de ácido úrico y ayudan a prevenir los brotes de gota. En un pequeño ensayo, los pacientes que perdieron 16 libras redujeron sus niveles de ácido úrico en 3 puntos. 
 
"El estilo de vida es muy importante en la gota, como lo es en la diabetes. Se puede controlar la gota si se sigue un buen estilo de vida", menciona el Dr. Choi. 

Hay dos corrientes de pensamiento sobre el uso de medicamentos reductores del ácido úrico para la gota. Algunos médicos creen que son necesarios sobre todo para las personas que tienen muchos ataques de gota, cálculos renales o depósitos de ácido úrico llamados tofos. Otros creen que cualquier persona que haya tenido uno o dos ataques de gota debería tomarlos. No se demostró que estos fármacos prevengan afecciones a menudo asociadas a la gota, como las enfermedades cardíacas y renales, y pueden tener efectos colaterales graves. La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) emitió su advertencia de seguridad más estricta para el medicamento contra la gota febuxostat (Uloric). En un estudio posterior a la comercialización, se descubrió un mayor riesgo de muerte con febuxostat que con un medicamento rival para la gota, allopurinol (Zyloprim). Asegúrese de hablar con su médico sobre los riesgos y beneficios de los medicamentos para la gota.