6 consejos de autocuidado para la artritis reumatoide

Usted tiene un papel importante en el control de su artritis reumatoide (AR). Aplique estos consejos de autocuidado para mantener sus síntomas bajo control.

El tabaquismo puede empeorar los síntomas de la AR y hacer menos probable la remisión. También hace que sea más difícil mantenerse activo, que es un aspecto fundamental del tratamiento de la artritis. Y aumenta el riesgo de padecer otros problemas de salud comunes en la AR, en particular, enfermedad cardíaca. Hable con su médico de atención primaria sobre los programas y productos que pueden ayudarlo a dejar de fumar. Su familia y amigos también se preocupan por su bienestar, por lo que pueden apoyarlo durante este proceso.

Perder peso puede ser difícil. Pero las células grasas liberan proteínas que causan inflamación. Esto no solo empeora el dolor articular, sino que hace que sea menos probable que sus medicamentos funcionen. Los estudios demuestran que las personas con obesidad tienen un avance más rápido de la enfermedad que las personas más delgadas. Incluso una pequeña pérdida de peso puede hacer una diferencia. Comience con una meta pequeña, como 10 libras. Y recuerde: la mejor manera de perder peso es combinar una alimentación saludable con ejercicio regular.

Es difícil pensar en un aspecto de la AR en el que la actividad física no ayude. El ejercicio

• Reduce la inflamación.
• Fortalece los huesos.
• Es bueno para el corazón y los pulmones.
• Alivia el dolor.
• Mejora el estado de ánimo y el sueño.
• Ayuda a bajar de peso.
• Mantiene la movilidad de las articulaciones.

El ejercicio no dañará sus articulaciones ni causará más dolor. No tiene que hacer solo ejercicios "suaves" como el tai chi o caminar. De hecho, hay pocos ejercicios prohibidos para las personas con artritis. Póngase como objetivo hacer 30 minutos de ejercicio cardiovascular la mayoría de los días y entrenamiento con pesas al menos dos veces por semana. Si no ha hecho ejercicio por mucho tiempo, tal vez sea conveniente recibir los consejos de un fisioterapeuta o un instructor de acondicionamiento físico certificado.

Dormir mal y la AR van de la mano. El dolor dificulta conciliar y mantener el sueño, y la falta de sueño lo hace más sensible al dolor. Dar vueltas en la cama también puede provocarle depresión y fatiga. La mayoría de los problemas en las personas con un diagnóstico reciente de AR se relacionan con la ansiedad y los síntomas de AR no controlados.

• Asegúrese de tomar sus medicamentos según lo indicado.
• Evite la cafeína a última hora del día.
• Limite el tiempo de pantalla antes de dormir.
• Haga ejercicio durante el día.
• Hable con su médico si estos consejos no lo ayudan.

La enfermedad de las encías puede hacer que su AR avance más rápidamente que si no la tuviera. Puede generar mayor daño de los huesos y cartílagos. Asegúrese de programar exámenes dentales regulares, coma de manera sana y cepíllese y use hilo dental todos los días. Si tiene problemas para cuidar sus dientes debido a la rigidez y el dolor de las manos, hable con su dentista o terapeuta ocupacional sobre maneras para facilitar el cuidado dental.

El estrés puede desencadenar brotes de AR. Encuentre formas saludables de controlar el estrés que funcionen para usted y su estilo de vida. Puede ser cualquier cosa que lo haga sentir tranquilo.

• Meditar.
• Practicar yoga.
• Hacer caminatas en contacto con la naturaleza.
• Pasar tiempo con sus mascotas.
• Escuchar música.