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Preguntas y respuestas de expertos: El COVID-19 y la reapertura de las escuelas

Sepa cómo sopesar los riesgos de enviar a su hijo nuevamente a la escuela con estos consejos de un pediatra especializado en enfermedades infecciosas. 

Pregunta: Nuestro distrito escolar vuelve a abrir las puertas este año. ¿Cómo sé que es lo suficientemente seguro como para enviar a mi hijo de vuelta a la escuela?

Respuesta:

Es poco realista pensar que algún protocolo o procedimiento va a hacer que la vuelta a la escuela sea completamente segura. La pandemia está lejos de haber terminado y enviar a su hijo de vuelta a la escuela implicará cierto nivel de riesgo.

La mejor manera de reducir ese riesgo es que todas las personas que reúnan los requisitos necesarios se vacunen, incluidos los profesores, el personal escolar y los niños de más de 12 años. La FDA ha aprobado recientemente la vacuna de Pfizer/BioNTech para mayores de 16 años. Todavía tiene el estado de autorización de emergencia para los niños de 12 a 15 años, simplemente porque todavía no se ha utilizado en ese grupo de edad durante el tiempo suficiente para recibir la aprobación, pero probablemente se aprobará en poco tiempo. La experiencia con la vacuna hasta la fecha muestra que es muy segura y eficaz en ese grupo de edad. Mientras tanto, la mayoría de las vacunas todavía no están disponibles para la mayoría de los niños, por lo que sigue siendo fundamental tomar otras precauciones.

Una parte importante de la reducción de ese riesgo es el distanciamiento físico. Esto no siempre es fácil de hacer en un entorno escolar, pero hay formas de reducir el riesgo de transmisión; como reducir el tamaño de las clases y limitar los grupos grandes. Las clases más pequeñas, o la división de niños en “burbujas”, también facilitan el rastreo de los contactos y la identificación de la causa de la infección en caso de que se produzca.

Las mascarillas son otro factor importante a la hora de sopesar los riesgos. Lo ideal sería que cualquier persona que pueda llevar una mascarilla, incluidos los profesores y los estudiantes, lo hiciera. Esto sigue siendo válido en entornos de grupos pequeños y especialmente cuando los pupitres están separados por menos de seis pies de distancia. Cada vez hay más datos que sugieren que, incluso cuando las personas cumplen con el distanciamiento social, el riesgo de contaminación ambiental, especialmente en lugares cerrados, es mayor si no se usa mascarilla. Por lo tanto, lo ideal sería que los niños lleven mascarilla en todo momento, incluso cuando las aulas estén preparadas de forma tal que haya una amplia distancia social.

Me gusta la forma en que los CDC se refieren a las “capas de protección” en sus pautas vigentes. Hay que acumular tanta protección como sea posible. El distanciamiento ayuda. Si no puede mantener la distancia, usar mascarillas, reunirse en grupos pequeños o burbujas, etc., se vuelve aún más importante.

Por último, y quizás lo más importante: averigüe si su escuela tiene un plan a largo plazo para cuando se produzcan infecciones. Su distrito escolar debería estar trabajando con los funcionarios de salud pública para establecer procedimientos de rastreo de contactos, de modo que cuando se produzcan exposiciones de riesgo, y no si se producen, estén preparados para afrontarlas. De no ser así, me plantearía que mi hijo siguiera con la enseñanza virtual.

Muchos trabajadores esenciales no tienen la opción de quedarse en casa en un entorno virtual, pero para otros, tomar la decisión de enviar a su hijo de vuelta a la escuela se reduce al nivel de aceptación de riesgos de su familia. Para ayudarlo a decidir cuál es ese nivel, puede resultarle útil esta lista de verificación de seguridad de los protocolos de seguridad escolar para la vuelta a la escuela.

Mientras tanto, mientras sopesa sus opciones, manténgase al día con las medidas esenciales para su protección y la de su familia. Use mascarilla, especialmente en lugares públicos, manténgase a una distancia mínima de seis pies de los demás y siga lavándose las manos con frecuencia. No deje de vacunar contra la gripe a su familia y a sus hijos.

La mayoría de los padres de niños con una enfermedad reumatológica tienen mucha experiencia en mantener a sus hijos seguros. Usted sabe cómo hacerlo. Lo ha mantenido seguro. Siga haciéndolo. 

David Cennimo, MD
Profesor adjunto de Medicina y Pediatría en la División de Enfermedades Infecciosas
Facultad de Medicina de Rutgers, New Jersey

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