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Miositis 

La miositis causa hinchazón y daño muscular. 

La miositis es una enfermedad que provoca inflamación muscular. La polimiositis y la dermatomiositis son los dos tipos más frecuentes. La polimiositis causa debilidad muscular en ambos lados del cuerpo, generalmente en la cadera, los muslos, los hombres, la parte superior de los brazos y el cuello.  La dermatomiositis causa debilidad muscular y erupción cutánea. La dermatomiositis en niños puede diferir de la observada en adultos.  La miositis afecta a unos 50,000 a 75,000 estadounidenses. 
 

Causas

Cualquier cosa que provoque hinchazón muscular, como las lesiones, el ejercicio enérgico, las infecciones o la exposición a algunos virus (el resfrío común y la gripe), puede actuar como desencadenante de la miositis. Determinados medicamentos (como las estatinas) y drogas ilegales (como la cocaína) también pueden causar miositis.  

Es muy probable que los tipos inflamatorios de la miositis, como la polimiositis y la dermatomiositis, sean el resultado de un mal funcionamiento del sistema inmunitario. El sistema inmunitario, que se supone que combate a invasores como los gérmenes, se confunde y ataca a las células y los tejidos del cuerpo. Los expertos todavía no saben con seguridad por qué sucede esto.  Un desencadenante, como una infección, podría dar inicio al proceso de la enfermedad en personas que tienen determinados genes.  

Síntomas

Los síntomas de la miositis suelen desarrollarse gradualmente e incluyen:  

  • Debilidad muscular. 
  • Hinchazón muscular. 
  • Dolor o molestias musculares. 
  • Fatiga 
  • Dificultad para mover las extremidades y levantar los brazos. 
  • Caídas. 

La polimiositis y la dermatomiositis suelen tener períodos de empeoramiento de los síntomas (brotes). Además de los incluidos previamente, los síntomas pueden incluir: 

  • Dolor articular. 
  • Falta de aire. 
  • Dificultad para tragar. 
  • Fiebre  
  • Adelgazamiento 
  • Fenómeno de Raynaud (sensibilidad al frío con un color azulado o blanco en las puntas de los dedos).  

La dermatomiositis causa sarpullidos irregulares púrpuras o rojos en el rostro, los párpados, los codos, las rodillas, los dedos de los pies, el pecho o la espalda. Estos sarpullidos pueden aparecer antes, después o al mismo tiempo que los síntomas de debilidad muscular. Las personas con dermatomiositis también pueden tener sensibilidad a la luz y bultos blancos duros debajo de la piel (calcinosis).   

Efectos en la salud

La miositis no causa cáncer, pero las personas con miositis (especialmente dermatomiositis) tienen más probabilidades de contraer cáncer. Los expertos creen que podría deberse al funcionamiento inadecuado del sistema inmunitario.  

La inflamación del músculo cardíaco (miocarditis) puede provocar cicatrices en el tejido y un mal funcionamiento del corazón.

La debilidad de los músculos de la garganta puede provocar dificultad para tragar, llamada disfagia. Aproximadamente un tercio de las personas con miositis tienen dificultad para tragar.

 El tejido pulmonar de las personas con miositis puede formar cicatrices, lo cual causa problemas para respirar. Alrededor del 30 al 40% de las personas con miositis tienen alguna forma de enfermedad pulmonar.  

Tratamiento

No existe una cura para la miositis, pero los síntomas pueden controlarse. El tratamiento incluye una combinación de medicación y cambios en el estilo de vida.  

Medicamentos 

Según el tipo de miositis que tenga, el médico podrá recetarle uno de estos tipos de medicamentos, o todos ellos: 

  • Corticoesteroides. El tratamiento suele comenzar con altas dosis de corticoesteroides para reducir rápidamente la inflamación. Estos medicamentos suelen administrarse con una inyección. 
  • Medicamentos inmunodepresores. Si los corticoesteroides no alivian los síntomas, pueden recetarse medicamentos que supriman el sistema inmunitario para los tipos inflamatorios de miositis. Los más comunes utilizados para tratar la miositis son el metotrexato y la azatioprina.  
  • Inmunoglobulina. Este producto purificado de la sangre, que contiene anticuerpos saludables, puede ayudar a evitar que los anticuerpos dañinos ataquen los músculos. Suele administrarse a través de una vena (por vía intravenosa).  

 

Diagnóstico

La debilidad muscular y la fatiga pueden producirse por diversas razones, de modo que el diagnóstico puede ser un proceso largo y complejo. A menudo, las personas con miositis tienen síntomas durante meses y les cuesta hacer las actividades cotidianas (como subir escaleras o ponerse de pie) mucho antes de ser diagnosticadas. 

Su médico le hará preguntas acerca de sus síntomas y sus antecedentes familiares, le realizará un examen físico para ver si hay síntomas cutáneos y signos de debilidad muscular, y le pedirá análisis de laboratorio o pruebas de diagnóstico por imágenes para realizar un diagnóstico. Es posible que el médico también realice una biopsia, que consiste en extraer una pequeña muestra de tejido muscular para ver si hay signos de inflamación y daños.   

Fisioterapia

La fisioterapia puede ayudar a fortalecer los músculos, prevenir la debilidad y la atrofia muscular, y mejorar la flexibilidad.  

Autocuidados

Ninguna dieta puede curar la miositis, pero adoptar una dieta antiinflamatoria puede ayudar. Esto incluye comer alimentos de la dieta mediterránea: frutas, verduras, granos integrales, pescados grasos y aceite de oliva extra virgen.   

Seguir las instrucciones del fisioterapeuta al hacer ejercicio regularmente mantiene los músculos fuertes y flexibles y puede evitar que los músculos se deterioren (atrofien). 

La protección solar puede ayudar a controlar los síntomas cutáneos y musculares. Es importante usar protector solar, sombreros de ala ancha y ropa protectora, y evitar la exposición al sol durante las horas pico. 

Controlar el estrés puede ayudar a mejorar el sistema inmunitario y el estado de ánimo. Las técnicas de control mental y corporal, como la meditación y el yoga, pueden ayudar con el impacto emocional de tener una enfermedad crónica. Tener una fuerte red de amigos, familiares y profesionales capacitados (como terapeutas y psicólogos con licencia) también puede brindar apoyo durante los momentos difíciles. 

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