Ir directamente al contenido principal

EN

Artritis juvenil (AJ)

La artritis juvenil afecta a cientos de miles de niños y adolescentes en los Estados Unidos.

La artritis juvenil (AJ), también llamada enfermedad reumática pediátrica, no es una enfermedad específica. Se trata de un término genérico para describir las enfermedades reumáticas e inflamatorias que se presentan en niños menores de 16 años.  Estas enfermedades afectan a cientos de miles de niños y adolescentes en los Estados Unidos

La mayoría de los tipos de artritis juvenil son enfermedades autoinmunes o autoinflamatorias. Eso significa que el sistema inmunitario, que se supone que debe luchar contra invasores externos como virus y gérmenes, libera sustancias químicas inflamatorias que atacan las células y tejidos sanos. En la mayoría de los casos, la artritis juvenil provoca inflamación, hinchazón, dolor a hipersensibilidad de las articulaciones, pero algunos tipos de artritis juvenil presentan pocos síntomas articulares, o ninguno, o solo afectan la piel y los órganos internos. 

Se desconocen las causas exactas de la artritis juvenil, pero los investigadores creen que ciertos genes pueden ser los responsables de que la artritis juvenil se active debido a un virus, una bacteria u otros factores externos. No hay datos que indique que los alimentos, las toxinas, las alergias o la falta de vitaminas causen la enfermedad.

Explicación de la AJ

Esta serie tiene como objetivo brindar a los padres y cuidadores consejos y recomendaciones de expertos sobre temas relacionados con la artritis juvenil.

Efectos de la AJ en la salud

Algunos de los síntomas y efectos en la salud de la artritis juvenil:
Articulaciones: Las articulaciones pueden enrojecerse o hincharse y sentirse rígidas, dolorosas, sensibles y calientes. Esto puede dificultar el movimiento o las tareas cotidianas. Los síntomas articulares pueden empeorar después de despertarse o permanecer mucho tiempo en una posición. 
Piel: los síntomas cutáneos pueden incluir una erupción roja y escamosa (psoriásica), una erupción leve con manchas rosadas (sistémica), una erupción en forma de mariposa en el puente de la nariz y las mejillas (lupus) o parches de piel gruesa y endurecida (esclerodermia). 
Ojos: Sequedad, dolor, enrojecimiento, sensibilidad a la luz y problemas para ver bien causados por la uveítis (inflamación ocular crónica). 
Órganos internos: Puede afectar los órganos internos, como el tubo digestivo (diarrea y distensión abdominal), los pulmones (falta de aire) y el corazón. 
Otros síntomas: Incluyen fatiga (sensación de cansancio extremo o agotamiento), pérdida del apetito y picos de fiebre. 

Diagnóstico

Un pediatra puede comenzar a determinar qué es lo que causa los síntomas, pero es posible que se derive a los padres a un reumatólogo, un médico con formación especializada en el tratamiento de la artritis. Algunos reumatólogos tratan solo a niños, mientras que otros tratan solo a adultos y otros tratan a ambos.

El médico hará preguntas sobre la historia clínica del niño, cuándo comenzaron los síntomas, cuánto tiempo han durado y sobre los antecedentes familiares del niño. También hará un examen físico para buscar signos de artritis juvenil, como limitación de la amplitud de movimiento, erupción cutánea, síntomas oculares e hinchazón, sensibilidad y dolor de las articulaciones.

Las pruebas diagnósticas incluyen pruebas de laboratorio que buscan marcadores inflamatorios y pruebas de diagnóstico por imágenes (radiografías, tomografías computarizadas, resonancias magnéticas) para detectar signos de daño articular y ayudar a descartar otras causas, como traumatismos o infecciones.
 

Tipos de artritis juvenil

Entre los tipos más comunes de artritis juvenil, se incluyen:

  • Artritis idiopática juvenil. La artritis idiopática juvenil es la forma más común de artritis juvenil e incluye seis tipos: oligoartritis, poliartritis, artritis sistémica, artritis relacionada con entesitis, artritis psoriásica juvenil y artritis indiferenciada. 
  • Miositis juvenil. Es una enfermedad inflamatoria que provoca debilidad muscular. Existen dos tipos: polimiositis juvenil y dermatomiositis juvenil, que también causa erupción cutánea en los párpados y en los nudillos. 
  • Lupus juvenil. Es una enfermedad autoinmune que puede afectar las articulaciones, la piel, los órganos internos (p. ej., el corazón, los riñones, los pulmones) y otras partes del cuerpo. La forma más común es el lupus eritematoso sistémico, o LES. 
  • Esclerodermia juvenil. La esclerodermia, que literalmente significa "piel dura", describe un grupo de afecciones que endurecen y tensan la piel.
  • Vasculitis. Este tipo de enfermedad provoca inflamación de los vasos sanguíneos, lo que puede causar complicaciones cardíacas. La enfermedad de Kawasaki y la púrpura de Henoch-Schönlein (PHC) son los tipos más comunes en niños y adolescentes. 
  • Fibromialgia. La fibromialgia es un síndrome de dolor crónico que puede causar dolor y rigidez musculares extendidos, junto con fatiga, desorganización del sueño y otros síntomas. Es más común en niñas, pero rara vez se diagnostica antes de la pubertad. 

 

Tratamientos


La artritis juvenil no tiene cura, pero con el diagnóstico temprano y un tratamiento intensivo, es posible la remisión (poca o nula actividad de la enfermedad o de los síntomas). 

Los objetivos del tratamiento de la artritis juvenil son:

  • Desacelerar o detener la inflamación e impedir la evolución de la enfermedad.
  • Aliviar los síntomas, controlar el dolor y mejorar la calidad de vida.
  • Prevenir o evitar el daño a las articulaciones y a los órganos.
  • Preservar la función y la movilidad de las articulaciones para la adultez. 
  • Reducir los efectos en la salud a largo plazo.

Un plan completo incluye medicación, actividad física, acupuntura, masajes,    terapias (mente y cuerpo) y hábitos alimenticios saludables

 

Medicamentos

Existen varios tipos de medicamentos que se utilizan para tratar la artritis juvenil. Algunos controlan la actividad de la enfermedad y otros alivian los síntomas. Entre los medicamentos que controlan la actividad de la enfermedad, se incluyen los corticoesteroides y las drogas antirreumáticas modificadoras de la enfermedad (DMARD). 

  • Corticoesteroides. Estos medicamentos antiinflamatorios de acción rápida se administran mediante inyección en el consultorio del médico. Por lo general, se utilizan para tratar la enfermedad hasta que otros medicamentos comiencen a actuar debido a los efectos colaterales.
  • Drogas antirreumáticas modificadoras de la enfermedad (DMARD). Esta clase de medicamentos, que incluye los DMARD tradicionales (metotrexato, sulfasalazina) y los biológicos, alivian los síntomas al inhibir el sistema inmunitario para que no ataque las articulaciones.  El metotrexato es el DMARD más utilizar para tratar la artritis juvenil. Los DMARD tradicionales pueden conseguirse en forma de comprimidos, pero los biológicos se inyectan o se administran mediante infusión en el consultorio del médico. 
  • Medicamentos que alivian los síntomas. Los medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (NSAID) y los analgésicos (analgésicos) alivian el dolor, pero no pueden reducir el daño articular ni cambiar el curso de la enfermedad. Estos medicamentos son de venta libre o con receta. 

Cada niño con artritis juvenil es diferente, y el tratamiento depende de la gravedad y del tipo de enfermedad. El médico puede comenzar con un enfoque moderado, comenzando con NSAID, analgésicos o un tipo de DMARD (generalmente metotrexato), o elegir un enfoque más agresivo que implique comenzar con una combinación de DMARD y productos biológicos para combatir la inflamación lo más rápido posible. En la actualidad, la mayoría de los médicos prefieren el tratamiento temprano e intensivo para desacelerar la evolución de la enfermedad, en lugar de esperar y observar. A medida que los médicos controlan la enfermedad, se pueden agregar o eliminar medicamentos.

Cirugía

La mayoría de los niños con artritis juvenil nunca necesitan cirugía, pero el reemplazo de articulaciones puede ayudar a niños con dolor intenso o daño articular grave. Muchos procedimientos pueden llevarse a cabo en forma ambulatoria. 

Terapias no farmacológicas 

Haz ejercicio. El ejercicio regular es fundamental para tratar la rigidez y el dolor de las articulaciones. Las actividades de poco impacto que no dañan las articulaciones, como caminar, nadar, andar en bicicleta y practicar yoga, son mejores, pero los niños con la enfermedad bien controlada pueden participar en casi cualquier actividad que deseen, siempre que cuenten con la aprobación del médico o del fisioterapeuta que los trata. En días difíciles, es importante encontrar un equilibrio entre la actividad liviana y el descanso. Tomarse descansos durante el día protege las articulaciones y preserva la energía.

Fisioterapias y dispositivos de asistencia

La fisioterapia y la terapia ocupacional pueden mejorar la calidad de vida de un niño enseñándole maneras de mantenerse activo y cómo llevar a cabo las tareas cotidianas con facilidad. A continuación, enumeramos otras formas en que los fisioterapeutas y los terapeutas ocupacionales pueden ayudar a los niños con artritis juvenil:

  • Enseñarles y orientarlos con respecto a los ejercicios de fortalecimiento y flexibilidad. 
  • Ayudarlos a mejorar el equilibrio y la coordinación. 
  • Aplicar técnicas de manipulación corporal.
  • Recetar y mostrar a los niños cómo usar dispositivos de asistencia (p. ej., aparatos ortopédicos, férulas, aparatos para mejorar la prensión manual).

Cuidados personales

Es importante que los niños y adolescentes tomen decisiones para llevar un estilo de vida saludable y que utilicen terapias complementarias para controlar el dolor y el estrés de la artritis. A continuación, algunos ejemplos:
  • Alimentación saludable. Comer ciertos alimentos, como los que se incluyen en la dieta mediterránea (p. ej., pescado azul o graso, frutas, verduras, cereales integrales y aceite de oliva extravirgen) y evitar otros (alimentos con alto contenido de grasa y azúcar, o procesados), puede ayudar a controlar la inflamación. 
  • Terapias con calor y frío. Los tratamientos con calor, como las almohadillas térmicas o los baños calientes, son mejores para atenuar la rigidez de las articulaciones y aliviar el cansancio muscular. El frío es mejor para el dolor agudo. Puede calmar las áreas doloridas y reducir la inflamación.
  • Tópicos. Las cremas, geles o parches adhesivos pueden aliviar el dolor en una articulación o un músculo. Algunos contienen los mismos medicamentos que se encuentran en comprimidos y otros emplean ingredientes que irritan los nervios para desviar la atención del dolor.  
  • Terapias Mente-Cuerpo. La meditación, la respiración profunda, las técnicas de distracción (escuchar música o leer) y la práctica de la visualización pueden ayudar a relajarse y desviar la atención del dolor, en especial en el momento de la inyección.   
  • Masaje y Acupuntura. Los masajes pueden ayudar a aliviar el dolor y calmar el estrés y la ansiedad. La acupuntura consiste en insertar unas agujas finas en puntos especiales del cuerpo para aliviar el dolor. En caso de tener miedo a las agujas, puede usarse la acupresión, que emplea una técnica de presión firme, en su lugar.
  • Suplementos. El uso de suplementos rara vez se estudia en niños, pero algunos suplementos que ayudan a los adultos también pueden ser útiles para los niños. Pregúntele al médico cuáles suplementos y vitaminas pueden resultar útiles y cuáles pueden tener efectos colaterales e interacciones con otros medicamentos. 
  • Estrés y emociones. Los niños y adolescentes con enfermedades crónicas tienen mayores probabilidades de deprimirse. Los terapeutas y psicólogos pueden ayudar a los niños a lidiar con las emociones y enseñarles estrategias de afrontamiento positivas. Un sistema de apoyo fuerte compuesto por amigos y familiares también puede brindar apoyo emocional en épocas difíciles.

Los niños pueden hacer amigos en diversos eventos de artritis juvenil de la Arthritis Foundation que se llevan a cabo a lo largo del año, y los adolescentes pueden participar en el programa iPeer2Peer de la Fundación, que los pone en contacto con un mentor adulto joven que también tiene artritis.
 

Escuche relatos de primera mano de cómo la artritis juvenil afecta la vida. Advertencia: ¡le servirá de inspiración!

Contáctese con nosotros

Obtenga las últimas noticias y actualizaciones sobre nuestros recursos y eventos relacionados con la artritis juvenil. Regístrese proporcionando su información a continuación.